Esta mañana vimos una maniobra extraña, un cambio de amura, que sólo podía obedecer a la reacción a algún percance. Se encontraba a 875 millas náuticas al este de Río de Janeiro. El barco, uno de los favoritos es esta Vendée Globe, ha girado a favor del viento y va a la deriva a menos de cuatro nudos.
Ross Daniel, director técnico de Alex Thomson Racing, dio una actualización a los medios de comunicación esta mañana,
“Ayer por la noche (sábado 21 de noviembre), mientras Alex realizaba una inspección de rutina a bordo del HUGO BOSS, detectó lo que creyó que eran daños estructurales en la zona de proa del barco. Inmediatamente nos notificó a mí y al equipo en tierra, y le dimos instrucciones claras que le permitieron realizar una inspección completa de los daños.
“Esa inspección ha revelado algunos daños estructurales en una viga longitudinal en la parte delantera del barco. El daño parece estar aislado solo en esa área. Aún no está claro qué causó este daño. Hasta ahora no ha habido incidentes preocupantes a bordo del barco durante la regata.
Junto con nuestros ingenieros estructurales y arquitectos navales, trabajamos toda la noche para armar un plan de reparación completo para Alex. Durante este tiempo, Alex descansó un poco a bordo para prepararse para comenzar el trabajo de reparación esta mañana.
Alex ahora ha puesto el barco en una posición segura para gestionar el estado de la mar con el fin de reducir el movimiento a bordo mientras realiza la reparación. Tiene todos los materiales necesarios a bordo, un plan detallado a seguir y un equipo de ingenieros de clase mundial que lo asesora. Por tanto, confiamos en su capacidad para completar la reparación.
Nuestro objetivo es realizar las reparaciones necesarias de forma rápida y eficaz, con el fin de minimizar los kilómetros perdidos y retomar la carrera”.