A pesar de los intentos de la tripulación por reducir la distancia de 700 millas en tres días, la meteorología ha sellado su destino. El anticiclón de las Azores ha bloqueado la ruta directa y se esperan violentas tormentas en lo sucesivo, con un mar impracticable, por lo que las condiciones en el Atlántico hacen que sea imposible para la tripulación finalizar la circunnavegación a tiempo. Desde este domingo 3 de enero, la tripulación de Spindrift 2 se ha visto obligada a levantar el pie del acelerador y dejar de navegar en modo récord.
Para lograr batir el récord, el maxi trimarán negro y dorado debería navegar a más de 26 nudos de media sobre la ruta directa pero la meteorología no le acompañará. Hasta ayer sábado, la posibilidad -incluso reducida – de cruzar la línea de llegada del Trofeo Julio Verne, situada frente al faro de Créac’h en Ouessant, todavía era real, y por tanto el récord alrededor del mundo aún accesible, aunque fuera por pocos minutos. Pero al final del día la situación se confirmó: las condiciones meteorológicas bloquean cualquier solución para alcanzar a tiempo la línea de llegada -hora límite el 6 de enero a las 17:43 horas GMT / 18:43 hora francesa). En primer lugar porque el anticiclón de las Azores está situado en medio de la ruta directa y obliga a Spindrift 2 a hacer un gran bordo hacia el noroeste siguiendo los pasos de su predecesor. Esto alargaría sensiblemente la ruta pero además, estas altas presiones con poco viento estarán presentes en todo el recorrido hacia el norte hasta Terranova.
Tempestades en la ruta
Para Yann Guichard, Dona Bertarelli y sus doce tripulantes será imposible tomar un atajo dirigiéndose a las Azores. Y por último pero no menos importante, el mal tiempo azota las costas bretonas y británicas y la situación dista mucho de mejorar ya que se espera una nueva y violenta depresión desde el sur de Irlanda hasta el cabo Finisterre a partir del domingo por la noche, con violentas rachas de viento el jueves.
Los próximos días no son un buen momento para navegar entre la península de Labrador y el golfo de Vizcaya. La mar gruesa de la zona de Ouessant sólo va a aumentar y volverse más y más caótica y peligrosa incluso para un velero de cuarenta metros de eslora. Este sábado el mar de Iroise se veía azotado por vientos de más de 35 nudos (72 km/h) con rachas de más de 60 (139 km/h) y olas que han superado los ocho metros.
Con estas condiciones el patrón, Yann Guichard, ha optado por la prudencia y la seguridad para no poner en peligro ni a sus tripulantes ni al barco: se hace necesario ralentizar para evitar lo peor de esta sucesión de golpes de viento, la precaución debe primar sobre cualquier otra consideración.
Yann Guichard, skipper de Spindrift 2:
“El anticiclón de las Azores continúa aumentando y debemos tomar una ruta más hacia el noroeste durante 1000 millas más (1852 kms) para poder rodearlo y alcanzar las bajas presiones. Esto puede ser difícil de entender cuando el sábado por la noche tan sólo llevábamos 170 millas de retraso respecto al actual defensor del récord pero, debido a este cambio de ruta, a nuestra llegada llevaríamos 1000 millas de retraso. Esperábamos que se abriera una ventana para poder tomar una ruta más rápida pero no ha sido el caso y hay que rendirse a la evidencia.
Vamos a tener que gestionar cuidadosamente nuestra llegada a Bretaña ya que los vientos y el mar anunciados son muy fuertes. No estamos en modo récord porque ya no podemos batir el Trofeo Julio Verne, el objetivo ahora es cruzar la línea de llegada en Ouessant con total seguridad.
Por supuesto hay un poco de decepción, tanto por mi parte como por la del equipo, pero lo hemos dado todo desde la salida, hemos hecho una bonita regata, el ambiente a bordo ha sido fantástico y podemos estar orgullosos de nuestro rendimiento. Hemos llegado al cabo de Hornos con 500 millas de ventaja pero la meteorología no ha querido ayudarnos hasta la llegada. Todo el mundo nos ha apoyado desde el principio al fin y esto tan sólo es un aplazamiento hasta una nueva tentativa de batir este récord del Trofeo Julio Verne.
Dona Bertarelli, proa – trimmer:
“Por supuesto que hay decepción por llegar tan cerca del final y no poder terminar el trabajo. Esto es y será siempre una bonita aventura. Mucho antes de nuestra salida ya conocíamos las reglas del juego, la meteorología hacía de árbitro. Hay que saber aceptar tu suerte. Ahora el objetivo el completar la circunnavegación y encontrarnos con todas las personas que nos han apoyado a lo largo de este Trofeo Julio Verne.