Justo cuando la IMOCA Ocean Masters New York to Barcelona Race alcanzaba el Estrecho de Gibraltar, esta madrugada se produjo un accidente a bordo del Safran, que le ha obligado a retirarse tras liderar la flota con autoridad.
Después de medianoche, Marc Guillemot y Morgan Lagravière estaban realizando una maniobra de cambio de vela -pasando de su génova 2 al menor génova 3- en el Safran, mientras navegaban a 65 millas de Tarifa en duras condiciones. Con el viento soplando con una intensidad de 35-40 nudos y el mar muy revuelto, Marc Guillemot se lesionó gravemente las costillas al sufrir una caída.
Guillemot lo relata: “Había mucha mar, y de repente en una ola muy grande el barco cabeceó, yo boté con él, y cuando el barco aterrizó me golpeé el costado con el tambor del enrollador. Por suerte Morgan vio lo que sucedió y fue capaz de venir a ayudarme, porque yo estaba literalmente doblado de dolor”.
Tras el incidente, Lagraviére viró el Safran hacia el norte para alejarse de las rutas de navegación. Posteriormente, cuando el Safran estaba acercándose a la costa española, Lagravière, que compite por primera vez en un IMOCA 60, habló con el comité de regatas para confirmar que la lesión de Guillemot era demasiado grave, que necesitaba tratamiento en un hospital y requerían colaboración para buscar un puerto donde desembarcar. El Safran se retiró oficialmente de la regata a las 8 de esta mañana, hora local.
Después de conectar con el comité de regatas, pusieron rumbo a Cádiz, unas 25 millas a su norte, llegando a Puerto Sherry a las 3 de la tarde. Nicolás Marino, Presidente de la Federación Andaluza de Vela, preparó todo el operativo para que Guillemot fuera desembarcado y trasladado de inmediato a un hospital. De momento aún no se conoce el alcance de la lesión sufrida por el navegante francés.
Antes de llegar a Puerto Sherry, Guillemot dijo que había estado en contacto con un médico de Quimper (Francia), quien le había dicho qué medicamentos tomar y que mantuviera reposo. “Acabo de salir de la litera, todavía me duele pero me encuentro mucho mejor. Lo que recordaré de todo esto es la gran regata que hicimos Morgan y yo. Trabajamos muy bien juntos, haciendo una buena navegación, por lo que podemos estar orgullosos. Tenernos que retirar por mi lesión es lo que más duele”.
Tras el abandono del Safran, el liderato de la IMOCA Ocean Masters New York to Barcelona Race ahora está en manos de Pepe Ribes y el estadounidense Ryan Breymaier, a bordo del Hugo Boss. Después de un largo bordo de ceñida hacia la costa marroquí, amurados a babor, este mediodía viraban a estribor apuntando a Tarifa con rachas muy duras. El tripulante de comunicación Chris Musseler informaba que el barco “estaba dando fuertes pantocazos continuamente”.
A bordo del Neutrogena, todavía a 34 millas de Tarifa (11:30 UTC), Guillermo Altadill dijo que había mucho ruido a bordo debido a los pantocazos y las olas, mientras trataban de evitar la inmensa cantidad de tráfico marítimo que entra y sale del Mediterráneo por Gilbraltar. El veterano “vueltamundista” no desveló si optaría por la ruta norte o sur para cruzar el estrecho. “Vamos a intentar estar pegados a una costa para encontrar menos oleaje y corriente en contra”, dijo, mientras cruzaba los dedos para que el viento amainara en el momento de pasar por lo más angosto del canal.
Altadill elogió la preparación del Neutrogena por su equipo de tierra y pensaba que esta era una de las razones por las que habían logrado estar tan cerca del Hugo Boss.
El veterano español también expresó su pesar tras conocer la lesión de Marc Guillemot. Él admitió que también tenía algunos morados, inevitables compitiendo en las duras condiciones como las que estaban sufriendo, pero que sus heridas no eran claramente tan serias como las del francés.
En la retaguardia, a las 11:30 UTC el GAES Centros Auditivos todavía tenía 93 millas que recorrer hasta Tarifa, donde les esperaban condiciones duras en el estrecho. Anna Corbella expresó su tristeza al conocer el incidente del Safran. “A lo largo de la regata hemos ido comentando constantemente que el Safran estaba haciendo una gran regata. Habían hecho un gran trabajo hasta el incidente. Le deseamos a Marc una pronta recuperación y felicitamos a todo su equipo por la gran regata que llevaban”.
Unos sentimientos compartidos por todos los involucrados con la IMOCA Ocean Masters New York to Barcelona Race.