La remodelación de la bocana del puerto deportivo de Calanova, Mallorca, supondrá la construcción de un espigón que prolongará el actual en 72m, en una L con 15m de ampliación del actual y 62m de manera transversal. Así lo explicaba el director general de Ports i Aeroports de Balears, Antoni Deudero, según la propuesta presentada por la empresa adjudicataria de las instalaciones, Port Olímpic Calanova S.L.
Respecto a la redistribución de amarres, los planes de la adjudicataria «es reducir el número de amarres, que pasará de los 212 actuales a 172 cuando se haya ejecutado el proyecto», según indicó Deudero, el cual reconoció que la nueva distribución de los atraques de Calanova «responde a las exigencias de seguridad en el espejo de agua, en especial en lo que se refiere a las distancias mínimas». Además, la obra permitirá la habilitación de 28 amarres para embarcaciones de hasta 20 metros de eslora y 6 para esloras de hasta 25 metros.
Además, los planes de la empresa que explota las instalaciones de Calanova incluyen ampliar hasta 60 los amarres para las pequeñas embarcaciones deportivas, con esloras de entre 4 y 6 metros, mientras que se reducen los correspondientes a las de esloras de entre 8 y 10 metros.
En este sentido el director general destacó que «en la actualidad las esloras más generalizadas oscilan entre los 10 y los 14 metros».