Ayer la prensa náutica francesa se hacía eco del juicio que tuvo lugar en el Tribunal Penal de Lorient sobre el accidente del pasado 16 de junio de 2015, cuando el Spindrift2, patroneado por Yann Guichard, chocaba contra una semirrígida hiriendo gravemente a uno de los pasajeros, que perdió una pierna.
El accidente se produjo durante una de las llegadas de etapa de la Volvo Ocean Race; el super trimarán había llegado a la Trinité Sur Mer, Lorient, para asistir a la llegada de la flota y al parecer accedió a una zona cerrada a la navegación. En el momento del impacto, el trimarán avanzaba a 24.83 nudos. La investigación de los guardacostas llegó a la conclusión de que el Spindrift 2 no debería haber estado allí y que al acceder al área restringida el patrón hizo una “evaluación equivocada de la situación poniendo en riesgo su barco y a la tripulación”. Por su parte Yann Guichard reconoció no haber advertido a los organizadores de la llegada de su barco a la zona.
Parece que la vista tratará de dilucidar hasta qué punto la maniobra fue arriesgada pues Yann Guichard está acusado de “lesiones involuntarias, con más de tres meses de incapacidad“, agravadas por “una violación manifiestamente deliberada de una obligación de seguridad y prudencia” y por “poner en peligro la vida los demás”.
La víctima, Virginie Le Namouric, que se encontraba en la embarcación el día del accidente junto a su marido y su hija, tuvo un pequeño encuentro con Yann Guichard antes del comienzo de la vista quien trató de trasladarle su preocupación.
La Procuradora Laureline Peyrefitte ha pedido una pena mínima de 6 meses de prisión para Yann Guichard , junto con una multa de 20 000 euros y la publicación de la condena en la prensa especializada.
Los abogados de la defensa pidieron la absolución de su cliente con el argumento de que hizo todo lo posible para garantizar la seguridad en el agua.
La sentencia se encuentra actualmente en deliberación.
