General
Hemos probado el yate más pequeño de la reconocida gama V Class -tan sólo tiene 40 pies- y el segundo más compacto del extenso portfolio de la británica Princess Yachts. La Princess V40 está pensada para seguir siendo atractiva con los años manteniendo inalterable el mismo sello de calidad que sus hermanos mayores. ¡Valor seguro en el competido segmento de los 40 pies!
}Y es que en los 56 años años de presencia en el mercado internacional, Princess Yachts siempre se ha mantenido “británica”. Princess Yachts nación en Plymouth y el astillero sigue allí produciendo para el mundo 300 embarcaciones anuales. Su plantilla está compuesta por 2.500 trabajadores. A pesar de las grandes turbulencias del mercado náutico con la globalización, Princess Yachts siempre ha tenido claro que la deslocalización productiva podría ir en su contra, especialmente en términos de control de calidad y en la hipotética pérdida de su esencia británica.
En 2008 Princess Yachts fue adquirida por el grupo inversor L Capital 2 FCPR, financiado por LVMH (Moët Hennessy Louis Vuitton) y Groupe Arnault. El grupo LVMH incluye más de 60 marcas internacionales de lujo incluyendo Louis Vuitton, Christian Dior, Fendi, De Beers, Moet Chandon, Veuve Clicquot y Krug.
Un paso importante y hasta un punto arriesgado en la historia del astillero ya que se tiende a pensar que los fondos de inversión suelen no entender las filosofías de los astilleros, imponiendo condiciones u objetivos que muchas veces, como ya se ha demostrado, acaban por mermar en la calidad, la esencia de la marca llegando a ponerla en dificultades por las prisas financieras que sus responsables buscan normalmente con ahínco.
Para Princess Yachts no fue el caso ya que el grupo inversor antes referido parece haber respetado hasta la fecha su buen hacer impulsando incluso la calidad y el glamour, constatándose en su momento un incremento notable y brusco de la calidad final y belleza de ésta marca marcadamente british con, sin duda, vocación internacional. Princess Yachts construye embarcaciones desde los 35 pies, como la R35 apadrinada por el navegante Sir Ben Ainsley, hasta los 95 m de eslora del X95.
Como se sabe Princess Yachts Barcelona (Magna Yacht Sales & Service ) es la importadora para la España peninsular y cuenta en estos momentos oficinas en Masnou y Marina Vela Barcelona y presencia en la Costa Brava, Valencia, Galicia y Madrid.
En Panoramanautico.com hemos asistido a una prueba de mar en aguas de Barcelona con una unidad de la nueva V40 que circunstancialmente debía trasladarse a las pocas horas a Cádiz para la entrega a su afortunado armador. Presentamos pues, la nueva Princess V40. Clasicismo a alto nivel en el competido segmento de los 40 pies.
Navegación
Navegar suave, cómodo y, si se quiere, deportivo
Con siete personas a bordo, agua al 50% de sus capacidad (322 L) y al sólo 20% de su capacidad (730 L) de combustible, iniciamos un corto pero intenso test con los representantes de la oficina de Princess Yachts ubicada en Marina Vela. El mar se muestra rizado con “mar de fondo” del través.
Dotado con dos Volvo Penta D6 de 340 Hp cada uno y transmisiones sterndrive o de colas, esta 12,98 m de eslora total, (12,65 de casco), de 10.145 kg aprox. de desplazamiento y 3,81 m de manga máxima, alcanzó con brío los 35 nudos de velocidad punta a 3.500 r.p.m. y un consumo de 70 L/motor. En las 2.500 vueltas y a 19,8 nudos el barco busca el planeo con un consumo de 40 L/motor y en las 2.800 r.p.m. el barco ya planea francamente a unos 21-22 nudos.
Destaca la rapidez con la que baja su morro y su rápida respuesta a los cambios de régimen, con una flexibilidad de los notores que invitan a pilotar deportivamente. Sí, su comportamiento es deportivo -si así lo deseamos-, gracias a la elasticidad de estos nuevos Volvo Penta D6, y al virar a alta velocidad constatamos que se muestra muy estable y con un excelente agarre, sin desplazamiento laterales. La escora está dentro de los parámetros de seguridad exigibles aún sin el uso de sus flaps y no creemos que infunda temor alguno a invitados ajenos al mar. No nos parece necesario usar flaps dada la ausencia de viento lateral ni tampoco modificar con las colas (trim) el asentamiento del barco ya que dicho asentamiento ya es óptimo sin hacer nada.
Percibimos que el casco ofrece un gran rendimiento gracias a su ángulo de quilla muy marcado (la conocida forma de uve) en el momento en que amerizamos yendo rápidos a contraola. Los amerizajes son “aterciopelados”, con pantocazos sordos, lo que equivale a decir, muy suaves. Sin duda sus tres redanes por banda trabajan de lo lindo en la sustentación ya que la sensación al navegar rápidos es el de una lancha grande, mostrando su 10.000 kgs de desplazamiento una gran ligereza sobre el agua. La estructura general se muestra muy rígida y no percibimos crujidos de ningún tipo en ninguna parte. Las puertas no se mueven en sus marcos, claro indicio de su rigidez y fortaleza estructural general.
Su velocidad de crucero la situamos en unos 22 nudos y nos percatamos el excelente trabajo realizado por el astillero en la insonorización de la sala de motores. La rumorosidad es muy baja, cosa que también es así cuando trabaja el generador y lo auscultamos desde la pared del camarote de invitados.
La visibilidad avante es excelente, tanto debidamente sentados en la hiperenvolvente butaca fija de su puesto de gobierno, como apoyados en su base abatible. En las escoras radicales que realizamos, no se pierde la visibilidad lateral en ningún momento. La consola en el puesto de gobierno permite una rápida lectura de tacómetros y datos en general de navegación gracias a su ángulo de visión. Un ángulo de visión que igual puede resultar incómoda para algunos patrones que quieran gobernar de pie y con el top abierto, ya que la vista avante se puede interrumpir con el marco del parabrisas. ¡Qué gran problema!
Habitabilidad
Distribución y acomodación clásica con estilo
Qué duda cabe que la V40 ofrece un diseño general típicamente “open” sin florituras, tanto en el exterior, cubierta principal como en la cubierta inferior de la acomodación.
Si miramos su perfil desde el exterior no daremos cuenta que, incluso los necesarios portillos de ventilación de los laterales han sido disimulados para no romper el bonito efecto de los acristalados de las bandas. Buen inicio, gran detalle. Otro aspecto interesante a destacar es que, por ejemplo, el arco es muy comedido y eso es debido al uso del textil lo que evita que éste deba ser más grande para aguantar un top corredero rígido abierto. De esta manera se gana también una mayor superficie de la apertura al exterior. Esta unidad dispone de plataforma hidráulica que facilita, por ejemplo, la estiba de una pequeña auxiliar. Por el contrario, esta unidad no disponía de la extensión opcional para crear un mini solario colgante, algo muy habitual en las embarcaciones open.
En la cubierta principal se dispone de una gran mesa de altura graduable (que puede convertirse en un solario) envuelta por tres bancos conformando así una dinette que queda perfectamente protegido del sol cenital o la lluvia vertical por un bimini téxtil extensible desde el voladizo del arco-portaradar. Naturalmente el conjunto está asistido por un wet-bar que ofrece una parrilla, un fregadero para las manos y una gran nevera de apertura vertical.
Más a proa, a babor, se dispone de un asiento, al estilo “chaise longue” algo curvo que acompaña a las dos personas en el puesto de gobierno, con sendas butacas envolventes fijas, es decir, sin el feo sistema visible de raíles que permita ajustar la distancia con la pared de la consola. Algo curioso y hasta cierto punto lógico ya que pocas veces se ajustan los asientos del puesto de gobierno a no ser que el piloto ocasional se exceda por exceso o defecto en la envergadura media.
El acceso por las bandas hacia proa, se puede realizar con comodidad desde los dos costados y con la garantía de seguridad de unos grandes asideros en el inicio. Los candeleros son altos y lanzados hacia proa, confiriendo los guardamancebos protección y seguridad al paso casi a la altura de la pelvis. El balcón de proa es cerrado, “cerrandose” así la posibilidad de desembarcar por proa… La proa muestra un solario de buenas dimensiones que complementa al solario interior que puede montarse en la dinette de la bañera. Frente a este solario, el de proa, y antes del pozo con el equipo de fondeo de proa, existe la escotilla de seguridad preceptiva que da al camarote del armador y un acristalado.
La acomodación dista de ofrecer una distribución especial. Es indudablemente clásica con un camarote a proa grande, de cama doble centrada y bien surtido para la estiba de enseres personales y ropa con tocador, que posee un lavabo con ducha aparte de acceso privado pero que se comparte con el resto de los moradores de abordo que pueden estar también a sus anchas en el camarote doble transversal de popa, que ofrece dos camas individuales y que, opcionalmente, pueden disponer de un sistema convertible en una doble. En el lateral de babor, existe en esta estancia un sofá de 2 plazas junto a un mueble bajo con cajones. El volumen es amplio y placentero para la vida abordo con la privacidad necesaria. Este camarote situado en un nivel inferior es cerrable con una puerta.
La zona central del barco está compartida con el salón, amplio y generoso con un gran sofá y una mesa de altura graduable que, en un momento dado, sirve de comodín para que dos personas puedan pasar la noche. Enfrente se halla el monitor de TV y bajo él un mueble bar.
Contiguamente se muestra una cocina completa en su máximo esplendor, dotada de horno, vitrocerámica, nevera vertical y multitud de cajones “soft” y armarios para la estiba de alimento y menaje. No llama poderosamente la atención el suelo de toda la estancia que es la recreación de una estética “parket” oscuro muy elegante y que aquí escapa del tejido moqueta que impera y tapa dicho suelo en toda la acomodación.
Balance
Calidad y detalles en cada rincón para el buen entendedor exigente
La V40 es una open con el marcado sello de la indiscutible calidad Princess. Hay multitud de ejemplos a los cuales nos podemos referir. La unidad probada ofrece una calidad de los acabados importante que deben señalarse. Lo decimos porque la calidad es a veces demasiado discreta para el/la posible interesad@.
Desde los sellados en los encajes de los moldes a la ausencia total de tornillería visible para el panelado de los tapizados aéreos de techos y paredes. Techos y paredes lucen diferentes tejidos y texturas muy a juego con los tonos roble de los suelos y el mobiliario interior (no apreciable en las fotos adjuntas suministradas por la marca). Colores y texturas que crean unos contrastes elegantes y que ofrecen al mismo tiempo un “charm” clásico/modernos muy agradable y estético a la hora de vivir durante unas semanas. Desde luego, una atmósfera diferente a los estilismos continentales y mediterráneos que habitualmente usan tonalidades más claras, menos contrastadas en los modelos seriados.
La calidad se ve también en los pomos de las puertas, los perfectos encajes de las mismas en sus marcos o en los sellados de goma que contribuyen a insonorizar conversaciones en los camarotes.
Por otro lado, vemos que los acabados del mobiliario muestran las características propias de buenos artesanos carpinteros como pueden ser ribetes de acero presentes de la mesa, propio de marqueteros avanzados, o las terminaciones de los cosidos del pasamanos de acceso en la entrada a los interiores, o la bella ejecución en el mobiliario de la cocina. Curiosamente nos nos pasa desapercibido el uso de azulejos “de verdad” en el suelo del único lavabo existente en esta V40.
Sin juegos malabares
Una de las cosas a tener claro con Princess Yachts es que la calidad será alta independientemente de la eslora o gama en la que posemos nuestro interés. Otro dato, es que el nivel de equipamiento opcional no es tan abrumador como en otras ofertas de 40 pies, y eso es una ventaja al no alterar demasiado el PVP final, evitándose las sorpresas al final del excel.
Ello no quiere decir que no se ofrezcan opcionales, más en el ámbito de la estética, simplemente que los opcionales no son acerca de elementos o equipamiento técnico que muchos armadores podrían considerar como básicos. Es por ello que la unidad probada, muy completa en su equipamiento general, tiene un PVP base de 480.000€ con la motorización citada. La Princess V40 se ofrece con otra motorización de 2 x 380 Hp también de Volvo Penta que, a nuestro entender, y al parecer también al entender de Princess Yachts, consideramos totalmente innecesaria.