Una imponente flota de 117 barcos ha confirmado su participación en la 70ª Rolex Sydney Hobart, que larga velas este viernes desde la bahía de Sídney, Australia a las 13:00h, hora local de Sídney, 03:00h de la mañana en la España peninsular.
Más de 20 nudos de viento de proa complicarán el avance de los participantes en el inicio del recorrido de 628 millas hacia la isla de Tasmania. Cinco supermaxis de más de 30 metros de eslora lucharán por el honor de cruzar la línea de meta en primera posición, incluyendo el Wild Oats XI en el que navega el español Juan Vila, el barco más laureado en la historia del evento, y el estadounidense Comanche, que debuta en competición con el objetivo de convertirse en el monocasco más rápido del mundo.
La Rolex Sydney Hobart es la regata oceánica por excelencia. Hasta 5.603 barcos y más de 52.000 tripulantes han competido en ella desde su estreno en 1945. En Australia supone una cita imprescindible cada 26 de diciembre, el conocido como Boxing Day. La expectación es máxima para la salida de su 70ª edición, cuando se espera que la flota abandone la bahía desplegando sus enormes spinnakers. De acuerdo con John Cameron, comodoro del organizador Cruising Yacht of Australia: “Calculamos que habrá medio millón de personas abarrotando la costa y cientos de barcos en el agua“. La televisión retransmite la salida en directo a nivel nacional.
El parte meteorológico sugiere un comienzo marcado por vientos en el entorno de los 20-30 nudos que garantizan una complicada primera jornada en el mar para la flota. “En la salida veremos la habitual situación de componente sur, que nos hará navegar con viento de proa por la costa de Australia”, explica el barcelonés Juan Vila, navegante a bordo del Wild Oats XI. Un escenario que agotará a las tripulaciones, pondrá a prueba la resistencia de los barcos y ralentizará su avance.
La previsión indica un cambio en la dirección del viento a medida que los más rápidos se aproximan a la isla de Tasmania, favoreciendo las aspiraciones del grupo perseguidor en la lucha por la victoria absoluta. “Será interesante ver esa transición de brisas ligeras antes del cambio de dirección del viento”, apunta Vila, que afronta su sexta participación en la clásica australiana. Cómo y cuándo se produzca ese punto de inflexión determinará el resultado de la regata.
Flota heterogénea
La flota de la 70ª Rolex Sydney Hobart es la más numerosa de la última década. Nada menos que 117 barcos con esloras comprendidas entre los 9 metros del pequeño Maluka of Normandie de Sean Langman y los 30,5 metros de los supermaxis. Entre ambos extremos encontramos barcos de todo tipo navegados por tripulaciones muy diversas, desde puramente profesionales a completamente amateur. Un repaso al listado de participantes descubre empresarios de éxito, una modelo, veteranos de las Fuerzas Armadas australianas, campeones de rugby, ases del surf,… y, por supuesto, una selección de los mejores regatistas de todo tipo de disciplinas. Ese es el espíritu de la clásica oceánica del Hemisferio Sur, intacto desde su primera edición de 1945.
La historia indica que cualquier barco es aspirante real a la victoria final, la que premia al mejor en tiempo compensado con el trofeo Tattersall’s Cup y un Rolex conmemorativo. El ganador 2013, el australiano Victorie de Darryk Hodgkinson –que regresa este año para defender título–, mide 15,2 metros, menos de la mitad que el vencedor de 2012. La gloria depende de las condiciones meteorológicas, de la habilidad de las tripulaciones y de la suerte. Más reducido es el grupo de aspirantes a cruzar la línea de meta en primera posición, cuestión de velocidad pura.
Los cinco grandes Supermaxis
Cinco supermaxis de 100 pies de eslora (30,5 metros) se reunirán en la línea de salida para luchar por la victoria en tiempo real. El australiano Wild Oats XI del magnate del vino Bob Oatley parte como enemigo a batir tras ganar siete de las últimas nueve llegadas y haber establecido el actual récord de la prueba en 2012. Construido en 2005 específicamente para reinar en la Rolex Sydney Hobart, ha ido evolucionando su diseño año tras año superándose en cada ocasión. “Son 628 difíciles millas hasta Hobart”, recuerda el patrón Mark Richards a quienes lo apuntan como favorito.
El más rápido en siete décadas de historia de la regata tendrá que defender su hegemonía frente a otros cuatro colosos, incluyendo un barco creado para convertirse en el monocasco más veloz del planeta: el estadounidense Comanche del fundador de Netscape Jim Clark. Botado el pasado octubre en Newport (Estados Unidos), el Comanche fue transportado directamente a Australia para su debut en competición sin apenas tiempo para la puesta a punto. “Es hora de comprobar lo que esta cosa puede hacer”, apunta su patrón, el estadounidense Ken Read, quien contará a bordo con una impresionante lista de tripulantes que incluye al australiano James Spithill, ganador de la America’s Cup con ORACLE Racing y elegido Mejor Regatista del Mundo ISAF Rolex 2014.
Completan el quinteto de supermaxis los australianos Ragamuffin 100 de Syd Fischer –que afronta su 46ª participación con 87 años– y Perpetual Loyal de Anthony Bell –segundo en la línea de meta el pasado año y ganador como Investec Loyal en 2011–, y el estadounidense Rio 100 de Manouch Moshayedi.
Para batir el actual récord de la Rolex Sydney Hobart, el ganador deberá completar el recorrido de 628 millas náuticas en menos de 1 día, 18 horas, 23 minutos y 12 segundos, la marca firmada por Wild Oats XI en 2013.
Video promocional de la 70 edición