El programa de la XIX BMTA (Borsa Mediterránea del Turismo Arqueológico), considerado por la UNESCO y la UNWTO como «mejores prácticas del diálogo intercultural» se dedica este año a la tragedia de Palmira que ha manchado de sangre Oriente Medio, poniendo en peligro la vida de hombres y mujeres y la herencia cultural. Anna Arzhanova, presidenta de la Confederación Mundial de Actividades Subacuáticas (CMAS) y Silvia Costa, presidenta de la Comisión de cultura, educación, deporte y juventud del Parlamento Europeo, han lanzado en Paestrum la iniciativa llamada los «Cascos azules del mar», como parte de la 19ª edición de la Borsa Mediterránea del Turismo Arqueológico, en la que se reunirán diversas eminencias de la arqueología mundial. Siguiendo la voluntad del Sr. Ugo Picarelli, este tema ha recibido el título: «Un año de gestión autónoma de los Museos Arqueológicos del Sur».
El elemento central en este evento, que durará cuatro días, será los «Cascos azules del mar», proyecto impulsado por la CMAS, la federación deportiva fundada por Jacques-Yves Cousteau. La puesta en marcha oficial de este proyecto fue moderada por el Sr. Andreas M. Steiner, director de “Archeo” y contó asimismo con la presencia de la Sra. Arzhanova y la Sra. Costa; la Sra. Ilaria Borletti Buitoni, subsecretaria del patrimonio cultural; y el Sr. Sebastiano Tusa (superintendente del mar para el gobierno de la región de Sicilia y el presidente de los grupos arqueológicos submarinos de Italia).
Las palabras entusiastas de Silvia Costa: «Estoy encantada de presentar esta iniciativa de gran valor deportivo, educativo y cultural: los Cascos Azules del Mar ya están operativos a partir del día de hoy en toda Italia, Europa y el mundo entero, para servir a la comunidad en aras de dar a conocer nuestros tesoros arqueológicos subacuáticos y estarán preparados para intervenir en cualquier parte del mundo con el objetivo de proteger y limpiar nuestros mares». Como parte de sus actividades, la CMAS promueve iniciativas relacionadas con la arqueología subacuática. «Queremos que nuestros miembros de la CMAS – dijo Arzhanova – puedan poner sus conocimientos y experiencia al servicio de la cultura en cualquier parte del mundo en favor de la conservación y la limpieza de los mares y océanos. La CMAS trabajará en armonía con la UNESCO y con todos los comités científicos, universidades y organizaciones no gubernamentales, formando un frente común que tendrá como objetivos recuperar los tesoros submarinos ocultos y liberar y limpiar nuestros mares. No podemos tolerar más la existencia de islas de plástico en el mar».
Las «islas de plástico» a las que se refiere la Sra. Arzhanova «son 5 enormes aglomeraciones de basura que flotan en los océanos matando a miles de especies marinas y aves. Una enorme catástrofe ecológica». Dos de las llamadas islas de basura a las que se hace referencia se encuentran en el Océano Pacífico (la primera, descubierta en 1996, parece ser tan grande como Europa), dos en el Atlántico y otra más en el Océano Índico. Estas son solo las más grandes. Incluso el Mediterráneo es un mar contaminado, con 115 mil trozos de plástico por kilómetro cuadrado, en la costa de Portoferraio (Elba) se registraron 892.000 mircopartículas por kilómetro cuadrado.
Asimismo, la Sra. Arzhanova afirmó que: «Nuestra obligación es participar en este grupo de trabajo y agradecer públicamente a todas las personas que han trabajado de una forma u otra en poner de relieve este desastre, tales como los investigadores oceanógrafos como Charles J.Moore; la investigadora estadounidense Kara Lavender Law; el holandés Boyan Slat (que como estudiante de ingeniería había ideado un concepto sin costo alguno destinado a la limpieza de los mares) o la artista María Cristina Finucci, fundadora del proyecto Garbage Patch State. Nuestro objetivo ahora es limpiar los mares y poner en marcha una campaña mundial de sensibilización y educación que incluya la participación en las escuelas y universidades de las generaciones más jóvenes. Con el objetivo de unir fuerzas en torno a este problema hemos querido crear un grupo de trabajo bajo el nombre «Cascos azules del mar» que simboliza el valor de nuestros esfuerzos globales». La Sra. Arzhanova y la CMAS también han expresado su voluntad y disposición para hacer realidad este sueño, este mito, que es «Agrupar todas las autoridades relevantes con el fin de dar respuesta a la búsqueda milenaria del mito de Atlantis». Las teorías más modernas ubicarían Atlantis, que inicialmente se pensó que se encontraba en el Océano Atlántico (no muy lejos de las Islas Canarias), en el Mar Mediterráneo, entre Creta (Italia) (Argentario, Sicilia o Cerdeña, siendo esta última la hipótesis más probable, tal y como describió el reportero arqueólogo Sergio Frau) y España.
Asimismo, al hablar de los mares, la CMAS quiere dirigir la atención a la situación de emergencia social que actualmente se está viviendo en toda Europa y los países mediterráneos: los migrantes. A tal fin, la CMAS lanzó la idea de crear, con la cooperación de las autoridades y asociaciones locales, un curso de formación en actividades subacuáticas dirigida a los migrantes de distintas nacionalidades que huyen de sus países y de la guerra. Un proyecto a través del cual la Federación Mundial quiere convertir el mar, como escenario de una pesadilla en la que los migrantes arriesgan sus vidas, en una oportunidad de redención a través de un papel activo en la cultura y la arqueología, la reapertura de una comparación interétnica de gran valor social. La cultura y el deporte son capaces de hablar un lenguaje universal capaz de unir a todas las personas y romper los muros y barreras que nos separan. La arqueología representa nuestro pasado, un pasado capaz de ayudarnos a comprender y explicar mejor nuestro futuro en un contexto de paz.
Silvia Costa y Anna Arzhanova declaran su intención de poner en marcha el próximo junio un flashmob, en memoria de Jacques-Yves Cousteau, fundador de la CMAS, al mismo tiempo, en las principales ciudades del Mediterráneo, donde el CMAS mostrará “cómo mantener limpias las costas y el medio ambiente marino de la contaminación. Nuestro objetivo es enseñar a los niños, estudiantes y familias el valor del respeto al mar, elemento crucial de nuestras vidas“, concluyó Ana Arzhanova.