General
El en PIBS 2022 pudimos ver y navegar algo el llaüt MedVolt M7. Una gran noticia ya que sus prestaciones y su autonomía son más que suficiente para el usuario tipo de esta clase de embarcaciones. Ahora sólo falta ampliar los espacios de recarga más allá de las torretas de los puertos ya existentes para dar un gran paso en el navegar “slow” con la electrificación, una modalidad claramente in “crescendo”.
Con unas líneas típicamente mallorquinas muy extendidas, reconocidas y reconocibles también en la península, se ha presentado recientemente el Med M7 del astillero mallorquín MedVolt Marine.
Una propuesta 100% eléctrica en el que el astillero ha confiado en un casco ya existente desarrollado en su momento para una propulsión de explosión, y que, en nuestra opinión, da unos resultados en prestaciones muy interesantes perfectamente comercializables sin temor a “errores”.
El casco de por sí, ya es muy marinero y ligero con lo que ha sido muy adecuada y nosotros añadimos “oportuna” la electrificación de su sistema de propulsión. La posibilidad de navegar a vela añade enteros a esta opción.
Como hemos dicho, ahora solo falta una generalización de los puntos de recarga. Lo decimos precisamente, porque una parte grande de su mercado natural, en la Costa Brava por ejemplo, no dispone de suficientes puertos abundando, por el contrario, los parques de boyas. La buena noticia es que ya se han hecho pruebas “oficiosas” de boyas solares para la recarga en Cadaqués, es decir, en pleno Parque Natural del Cap de Creus.
MedVolt Marine. Bienvenidos con el MedVolt M7.
Navegación
Medvolt M7, navegación eficiente con una autonomía muy comercial
La navegación eléctrica, por qué no reconocerlo, se nos hace aún algo extraña. Echamos en falta en nuestro ensayo en Palma con 8 personas a bordo, su capacidad máxima, el clásico pistoneo de un motor de combustión. Rápidamente nos dimos cuenta a bordo, por qué no decirlo también, que la conversación entre nosotros era anormalmente clara sin necesidad de levantar la voz.
En nuestros lances por el puerto de Palma pudimos comprobar que los 10 kW de su motor con eje y una hélice fija de tres palas y dos bancos de baterías de litio de 20.000 Wh, la velocidad punta fue de 7 kn, considerando que íbamos 8 personas, su capacidad legal máxima. El desplazamiento en seco del M7 de MedVolt Marine es de 1.400 Kg.
Según el astillero su autonomía a esa velocidad es de 4 horas de navegación y un alcance de 26 millas. Faltaría una comprobación más fehaciente, pero nos imaginamos que estos datos, ofrecidos por el astillero, pueden variar, aunque creemos que muy poco, por las condiciones de mar, de viento y numero de tripulantes.
Hay que añadir que, el barco, no estaba lastrado convenientemente o del todo, flotaba demasiado, cosa que se compensó perfectamente con los 8 tripulantes a bordo. Es por ello que pensamos que, a la hora de entregar un barco a su armador, entendemos que el peso añadido con el que se debe lastrar siempre este tipo de embarcaciones, estará en consonancia con la media de tripulantes que el propietario considere en sus programas de navegación habitual y los pertrechos a bordo que se pudieran llevar. Este fino equilibrio es ahora más importante en el mundo eléctrico.
A 5,5 nudos, efectivamente, se gana un mayor alcance en millas 40 según el astillero y también aumentamos la autonomía en tiempo a 7 horas y pico. Si rebajamos la velocidad a 4,5 nudos, el aumento en horas de navegación posibles aumenta hasta 13 horas y pico con un alcance estimado de 60 millas según nos indica el astillero.
La electrificación de su propulsión nos mostró que a la hora de maniobrar se gana en precisión, debido a que la entrega de potencia “atrás” o “avante” es mucho más directa y la embarcación reacciona con mayor celeridad. La maniobra de abarloamiento al muelle no pudo ser más gozosa… ¡sin hélices de proa!
Sin duda es un gusto navegar en silencio, ya que el único sonido percibible a bordo era la rumorosidad de la propia hélice en el agua. La insonorización realizada del astillero MedVolt Marine neutralizó perfectamente el mínimo zumbido del motor marino holandés Waterworld, instalado igualmente en una bancada laminada al casco. ¡Bravo!
Habitabilidad
MedVolt M7, la aventura posible gracias a una interesante mini-acomodación
Además del atractivo de ser 100% eléctrico, en una embarcación de fácil mantenimiento, el M7 de Medvolt ofrece otro enorme punto de interés. Tiene la posibilidad de ponernos a resguardo del sol bajo cubierta o la posibilidad de, incluso, pasar una noche de aventuras con los peques… ¡o no tan peques! Por supuesto se ofrece una amplia bañera para unas 6 personas sentadas en su banco en forma de “U” invertida y una gran cubierta en proa, con mucho ángulo de caída que es un magnífico solario. El “Cap de Mort” de proa delata ese orígen tradicional del llaüt, llaúd o “llagut” mallorquín. La delfinera, ¡todas feas!, debemos admitir, sin embargo, que es útil para el uso del molinete.
Acomodación mini
Dispone de dos bancos con un formato de cama individual cómodo y un inodoro químico camuflado que entendemos que también podría ser de agua tipo “vacuoflesh” bajo petición. Esta estancia puede permanecer con la tapa abierta para que corra el aire, como en los veleros ya que de hecho, hablamos de una acomodación en toda regla, mini, pero acomodación. Por supuesto algo espartana porque no olvidemos que la eslora total del M7 de MedVolt Marine es de solo 7,3 m de eslora y 2,6 m de manga. Lo suficiente, creemos, para soñar con alguna aventura más allá de nuestro puerto o campo de boyas base.
Balance
MedVolt M7. ¡Ya era hora!
Los tiempos han cambiado y la navegación “slow” cobre quizás más sentido ahora que podemos hacerla eléctricamente. A ella hay que destacar que el astillero no ha omitido la posibilidad de navegar a vela con un aparejo milenario, eficiente y más sencillo de lo que muchos se creen.
El M7 ofrece todo lo habitual en este tipo de embarcaciones. Probablemente, además de su sistema propulsivo, la posibilidad de disponer de refugio bajo cubierta, lo distinga también de otras muchas otras opciones en su segmento de eslora. Nos llama la atención, en la unidad probada, la no protección de la hélice entre la quilla y el codaste, algo que suele hacerse habitualmente para evitar, por ejemplo, un cabo o un tronquito a la deriva. Nos gusta sobremanera la minimizada coqueta consola de gobierno. Un acierto que pretende no llenar innecesariamente el amplio espacio social de la bañera. En nuestra opinión quizás pueda faltar algo de mimo en los candeleros y guardamancebos. En nuestra opinión, algo exagerados en altura, y poco elaborados o espartanos respecto a otras posibilidades, aunque entendemos que, en aras de de simplificar y de no añadir peso innecesario, se opte por el tubo de acero inoxidable tal cual.
Los llaüts. Una obvia posibilidad comercial de electrificación
La electrificación desarrollada por MedVolt Marine en el M7 no es más que aplicar con un buen criterio técnico una aplicación eléctrica en un casco probado con otros dos sistemas propulsivos: el tradicional con el viento y el de un motor de explosión. El éxito más que probable de esta opción 100% eléctrica pivota alrededor de tres realidades:
- El usuario habitual de estas embarcaciones ya navega dentro del rango de velocidades y las autonomías en millas y tiempo mencionadas del M7…
- El M7 es una tipología de barco, el “llaüd balear” muy extendida y aceptada también más allá de las baleares
- Una sencillez de mantenimiento pasmosa con unos PVP que probablemente puedan ir a la baja gracias a la evolución en tecnología y precios de las baterías, siempre y cuando que el astillero no introdujera aparte nuevos elementos de mejora en el M7.
Hay que reconocer, pues, que el M7 de MedVolt Marine sea probablemente el barco 100% eléctrico con mayor potencialidad comercial que hayamos visto últimamente. Enhorabuena por esa extraodinaria visión. Y un indicio fue el enorme interés suscitado en el Palma International Boat Show de este año.
¡Felicidades!