La European Boating Industry (Asociación Europea de Industrias Náuticas) organizaba el pasado 21 de enero la tercera conferencia internacional sobre náutica en el marco del Boot Düsseldorf. En el foro se analizó profundamente la evolución de la industria en Europa, Sudamérica, y sudeste asiático, si bien, quedó patente que América del Norte es el mercado con más crecimiento con respecto a los otros mencionados, donde las incertidumbres económicas y las barreras a la importación siguen poniendo trabas al desarrollo del comercio.
El mercado norteamericano al alza
En la primera mesa redonda de la jornada, el vicepresidente de la Asociación Nacional de Fabricantes Marinos norteamericana (NMMA), Tom Marhevko, tomó la palabra para hablar de la situación en la zona, destacando que 140 millones de estadounidenses practican deportes al aire libre con una inversión de más de 646 millones de dólares al año. Señaló que uno de cada cinco dólares que los consumidores gastaron en estas actividades fue a parar a la navegación y la pesca. Asimismo, destacó que la práctica de la vela ha crecido un 26% en los últimos cinco años, mientras que la pesca y la caza han subido un 11% y un 9% respectivamente.
Según Marhevko, el mercado de los EE.UU. está dominado por embarcaciones remolcables, así el 45% son menores de 16 pies, el 50% tienen entre 16 y 25 pies, y el 5% son de 26 pies o más grandes. En cuanto a la demanda, los barcos fueraborda de aluminio son los más populares. A Marhevko le siguió una presentación a cargo de Christoph Ballin, CEO de la compañía fabricante de motores eléctricos Torqeedo, quien compartió con los asistentes su buena experiencia en exportación a los EE.UU, centrándose básicamente en lo que se podía y no se podía hacer.
Sudeste asiático, mercado emergente
La segunda parte de la conferencia se dedicó al sudeste asiático con especial hincapié en China. Mike Derrett, propietario de la consultora Mike Derrett Marina (consultora), presentó una visión general de esa parte del mundo. Señaló que el consumidor en esta región es más emocional, y la compra de productos de alto precio, tales yates, es una forma de demostrar al mundo su riqueza.
En cuanto a la demanda, Derrett dijo que los sectores custom y semi-custom están creciendo al mismo tiempo que el cliente se preocupa por el valor de la embarcación a largo plazo. Explicó que los clientes de esta parte de Asia son cada vez más contrapuestos a los de Occidente, y concluyó animando a las empresas europeas a invertir en estos mercados teniendo siempre muy en cuenta la cultura de estos países.
Derrett estuvo acompañado por Xavier de Montgros, director asociado de ODC Marine, compañía constructora de barcos e importadora, quien explicó cómo entrar en el mercado chino y, lo más importante, cómo mantenerse y hacer negocios allí.
Sudamérica,
En el panel final de la Conferencia, Murielle González Oisel, periodista de la publicación IBI, describió los mercados de navegación de América Central y del Sur, con foco principal en los países menos conocidos, como Costa Rica y Colombia. Habló de desarrollo marinas, la construcción de barcos y los impuestos de importación existentes, que son a menudo un obstáculo al comercio para las empresas extranjeras que quieren invertir en esta parte del mundo.
Su discurso reveló que la navegación es una actividad muy popular en la región, pero el mercado vive principalmente gracias a yates de crucero internacionales. Aparte de Brasil y Argentina, la industria de náutica en esta área geográfica está en su fase más incipiente, pero el creciente número de navegantes locales ha hecho aumentar la demanda de amarres, así como los servicios de reparación y mantenimiento.
La conferencia, que cada año reúne a un gran número de protagonistas, profesionales de la náutica y periodistas especializados, verá su próxima edición el miércoles del Boot Düsseldorf 2016.