A medida que la noticia se ha difundido entre los participantes de la Vendée Globe, éstos le han ido enviando mensajes de solidaridad y apoyo mientras navega rumbo a Ciudad del Cabo (Sudáfrica) para reparar los daños. El líder de la regata Alex Thomson dijo que la noticia le hizo darse cuenta de lo afortunado que había sido cuando su barco no sufrió daños tan graves cuando el británico colisionó con un objeto hace una semana. Su foil de estribor se rompió, pero a diferencia de Riou ha podido continuar. “Lo siento realmente por él, es uno de los mejores con uno de los barcos buenos”, comentaba Thompson. “Estaba bien preparado y es horrible lo que la sucedido. La anterior vez también golpeó otro objeto en medio del océano. Estoy muy triste, me siento mal por lo que le ha sucedido. Claramente, las cosas podían haberme ido peor a mí, pero todavía puedo seguir en regata. Aún estoy en la caza, por lo que sigo apretando, intentándolo con todas mis fuerzas y vamos a ver qué pasa”.
Thomas Ruyant, en décima posición con su Le Souffle du Nord pour le Projet Imagine declaró: “Estoy muy triste por Vincent. Ya le he enviado un correo electrónico. Él nos ayudó cuando estábamos preparando este proyecto, es alguien con quien he conseguido hablar mucho y siempre tiene un buen consejo que darte. Es una lástima que acabe su regata tan pronto”.
Jean Le Cam: “Vincent es uno de los chicos que aprecio, y este es el final de una aventura para él”, comentó. “Todos sabemos que es cuestión de suerte. Llega un momento en que puedes topar con un objeto en el agua. La vida sigue y hay que recuperarse. Le ha sucedido a Vincent y le sucederá a otros. Puedes tener todas las alarmas del mundo pero si hay algo flotando en el agua no hay nada que puedas hacer”.
A pesar de su clara decepción, hoy Riou ha sido pragmático sobre la situación. “Voy rumbo a Ciudad del Cabo y mi plan es desmontar la quilla enseguida. El equipo técnico está de camino con las piezas de recambio y luego voy a navegar de regreso a Europa tan pronto como sea posible. Cuando este tipo de cosas suceden, cuanto antes reacciones es mejor para todo el mundo“.
Riou está fuera de juego, pero la regata continúa a un ritmo vertiginoso. El trío de cabeza tiene un margen de 200 millas respecto Morgan Lagravière, cuarto, mientras que su rival Paul Meilhat se encuentra ahora a 600 millas de Thomson. A pesar de sus 1.000 millas de desventaja, Yann Eliès todavía está, increíblemente, en contacto con el grupo de delante, ocupando el octavo lugar. Pero el gran ganador en las últimas 24 horas es Eric Bellion, que ha escalado cuatro posiciones alcanzado el puesto 18º.
Vincent Riou, PRB:
“El problema en la actualidad es que es difícil enviar ondas para detectar objetos en el mar. Para un sonar los constantes cambios de rumbo limitan su eficacia. En regata son dispositivos que pesan varios cientos de quilos y consumen mucha energía. Con nuestros presupuestos no hemos encontrado nada fiable. Simplemente no existen. Pero éste es uno de nuestros principales problemas. Creo que al menos diez barcos han colisionado con objetos desde la salida en esta Vendée Globe. Algunos han sufrido daños como Sébastien Josse, a quien anoche le saltó el timón. Alex Thompson ha roto un foil y yo me he visto forzado a retirarme. Hace una semana estaba maniobrando en la proa cuando el barco pasó entre una ballena y su cría. Había muy pocos metros entre los dos cetáceos”.
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Alex Thompson, Hugo Boss:
“El viento está bajando poco a poco. Sería bueno tener un poco de descanso, imagino. El viento ha rolado un poco hacía popa. En algún momento voy a tener que trasluchar. Creo que vamos a tener poco viento durante un rato, así que será interesante ver qué ocurre. Banque Populaire y Gitana siguen conmigo. Cuando los demás entren en el mismo viento será interesante ver cómo afecta a mi desventaja de tener el foil roto. Ahora tengo un buen viento con mar fuerte y la desventaja de no tener el foil es relativamente pequeña. El tema ahora es que de la otra amura sí podré utilizar el foil de ese costado, así que recemos para que el resto de la regata sea amurados a estribor”.
Pieter Heerema, No Way Back:
“El viento está oscilando de 8 a 14 nudos y de popa, del este-noreste. En realidad, para mí este viento es de agradecer porque tengo tres faenas que requieren un poco de tranquilidad. Tengo que trabajar en el timón, que es bastante arriesgado porque debo colgarme por el espejo de popa para hacerlo, y no debo perder piezas. Luego tengo un foil que está atascado y no puedo perderlo, y para rematar tengo una potabilizadora de agua que no funciona. Es triste lo que le ha ocurrido a Vincent. Después de toda la preparación, él deseaba firmemente completar otra Vendée y, posiblemente incluso ganarla, aunque creo que lo tenía complicado. Es muy triste que le haya sucedido más o menos lo mismo que hace cuatro años. A veces da miedo pensar en la cantidad de objetos que van a la deriva en el océano. Si vas en un barco lento haciendo ocho o nueve nudos quizás oyes un golpe y ya está, pero en barcos como los que nosotros tenemos, las velocidades y el empuje son tan enormes y los barcos tan frágiles que inmediatamente puedes tener problemas mayores. Asusta bastante”.
Jean Le Cam, Finistère Mer Vent:
“Creo que voy a llamar a Vincent directamente. Nos conocemos desde hace tiempo. Seguro que son momentos duros. No se puede hacer nada. Te sientes como un idiota. Todos sabemos que el azar también juega; en cualquier momento puedes golpear contra algún objeto que esté aquí en medio… A veces no encuentras las palabras, no sabes qué decir. Pasamos el 80% del tiempo en el interior del barco y no hay alarmas que puedan avisarnos de los objetos flotando entre dos aguas, semi-sumergidos.
Ayer fue el apocalipsis. Durante cuatro horas navegué a dos tristes nudos de velocidad. Ahora ya hemos salido del pozo, estoy donde debo estar. Vamos a 12-14 nudos de velocidad con espí en condiciones tranquilas y esta noche pude dormir seis horas. ¡Me ha sentado de maravilla! Vamos a negociar la borrasca del sur. Durante el día arriaré el J1, hasta ahora lo he utilizado mucho. Debo doblarlo bien y guardarlo en el interior durante unas semanas…”.
