El grupo mayoritario “Junts pel Si” y la “CUP” han presentado en el Parlamento de Catalunya una proposición de ley del impuesto sobre los activos no productivos de las personas jurídicas.
Esta proposición gravaría aquellas sociedades mercantiles que tienen embarcaciones de 8 o más metros de eslora amarradas en los puertos de Catalunya, al menos 183 días en los 12 últimos meses, y que se destinan a un uso privado de sus socios.
Según la proposición de ley, si usted tiene una embarcación de 8 o más metros para uso propio en una sociedad mercantil, o una sociedad civil con objeto mercantil, amarrada en Catalunya, recuerde que esta embarcación es un activo no productivo, y usted está contraviniendo la función social de la propiedad, e interfiere negativamente en la asignación eficiente de los recursos, en el progreso social y económico y en la distribución equitativa de la renta.
Les tengo que reconocer que he leído la proposición del nuevo impuesto varias veces y el párrafo anterior muchas más, y he tenido que preguntar a nuestro fiscalista Don Alex Massaguer sobre qué le parecía la propuesta. Su respuesta ha sido clara: La Generalitat continúa el expolio fiscal contra los contribuyentes de Catalunya.
Como reflexión, el texto que ha llegado a mis manos parte de errores de bulto en lo que a las embarcaciones se refiere:
– Pretender que una embarcación de 8 metros y medio de eslora es un artículo de lujo improductivo es desconocer el sector .
– Olvidar el bajo nivel de matriculaciones de embarcaciones nuevas y creer que las embarcaciones envejecidas que han aguantado 10 años de crisis flotando como almas en pena en nuestros puertos son un gran patrimonio es no mirarse las listas de depreciación que la propia Generalitat publica anualmente.
– Pensar que los que tienen en el 2017 un barco es porque no lo declaran, simplemente desconocen la eficacia de la Agencia Tributaria Española, de la Agencia Tributaria Catalana y de los Servicios de Aduanas.
– Creer que los barcos de grandes esloras y de banderas de conveniencia que hay en Catalunya se van a quedar en Catalunya a pagar el 1% de su valor anualmente porque sí, es de risa. Por favor, sepan que se buscaran otros destinos.
Aquí los grandes perjudicados con la iniciativa serian los concesionarios, y la propia administración portuaria de la Generalitat de Catalunya, sobre todo por el efecto huida que se va a provocar de posibles clientes y la campaña gratuita que desde el altavoz de la administración pública se desplegará en contra de la náutica.
La proposición, si persiste en el tema de las embarcaciones, lejos de recaudar, conseguirá construir nuevas barreras de entrada y rechazo a la náutica; y con ello, ni se genera un progreso social y económico, ni se ayuda a la distribución equitativa de las rentas, ni se traduce en la función social de la propiedad, ni asigna eficientemente los recursos.
Jaume Prats