La demanda rusa de grandes barcos y yates puede disminuir este año, ya que los precios globales de petróleo, gas y energía se mantienen en niveles bajos, además, se observa un cambio en las preferencias de los consumidores, según informan desde la Asociación de Industrias Náuticas de Rusia y del Ministerio ruso de Deportes y Turismo.
A pesar de algunas predicciones de los analistas, los precios globales de los recursos energéticos siguen siendo bajos en comparación con los máximos históricos de 2013/14, obligando a muchos empresarios rusos a mantener sus gastos en artículos de lujo en niveles bajos, y a alquilar yates en lugar de comprarlos.
La situación se ve agravada por el llamamiento de Vladimir Putin, dirigido a propietarios nacionales de yates, para que inviertan en el desarrollo de infraestructuras náuticas en Rusia, especialmente en la costa del Mar Negro.
De acuerdo con Pavel Kolobkov, ministro de Deportes y Turismo de Rusia, alrededor de 350 yates grandes fueron vendidos en 2016, en su mayoría a los rusos. Sin embargo, esta situación podría cambiar significativamente este año, ya que la mayoría de ricos rusos no parece dispuesta a invertir la misma cantidad de dinero que el año pasado en grandes yates.
De 2000 a 2008, los precios mundiales del petróleo pasaron de 30 a 140 dólares por barril, convirtiendo a los rusos en los principales consumidores de grandes embarcaciones y yates. De 2008 a 2016 se construyeron alrededor de 50 superyates de más de 80m, y un número significativo de ellos fue comprado por los rusos.
Sin embargo, según los principales distribuidores e importadores de yates de Rusia, desde el comienzo del año en curso las preferencias de los consumidores de los rusos han cambiado. En lugar de eslora, los rusos están actualmente más interesados en el diseño de un yate y su funcionalidad.
Con el fin de satisfacer mejor sus necesidades, varios empresarios rusos y armadores de yates están considerando la compra de algunos de los principales astilleros de Europa que se especializan en la construcción de yates.
Vagit Alekperov, jefe de la productora privada de petróleo ruso Lukoil, es propietario del astillero holandés Heesen Yachts, que fue adquirido a su fundador Franz Hisen por unos 100 millones de euros en 2007. Existe la posibilidad de que otros propietarios de yates rusos sigan su ejemplo.
En la actualidad Heesen se especializa principalmente en la construcción de yates de alta velocidad fabricados en aluminio. Su cartera de clientes incluye a varios conocidos empresarios rusos, extranjeros y políticos.