General
En estos tiempos, no es fácil dar una respuesta a las necesidades del aficionado con costes razonablemente adaptados a las circunstancias del momento con la calidad a la que estamos acostumbrados. En Lema Boats este complicado ejercicio lo saben hacer. He aquí otra muestra, he aquí la Koper 19, posiblemente la Lema menos Lema.
En estos tiempos, no es fácil dar una respuesta a las necesidades del aficionado con costes razonablemente adaptados a las circunstancias del momento con la calidad a la que estamos acostumbrados. En Lema Boats este complicado ejercicio lo saben hacer. He aquí otra muestra, he aquí la Koper 19, posiblemente la Lema menos Lema.
Navegación
Koper 19, agil, rápida y segura
La Koper que gentilmente cedió Lema Boats con la colaboración técnica de Nautica Boronad, su distribuidor en la zona, y Touron importador de Mercury para España, no nos dio ninguna sorpresa por cuanto conocemos muy bien el extraordinario navegar de toda la gama Lema. La Koper 19, esta vez dotada de un fueraborda Mercury FourStroke de 115 caballos, también nos gustó.
A pesar de obtener una más que probable mejora en los rendimientos de navegación si cambiáramos el paso de la hélice, la Koper 19 demostró que con potencias medias se obtienen unos registros muy atractivos acordes con el espíritu joven de esta propuesta de apenas 6 m de eslora.
Navegamos con un mar en marejadilla con una resaca de mar de fondo cruzado que complicó navegar rápido pero, incluso en estas condiciones la Koper 19 demostró unos amerizajes suaves al abrir su casco, moderadamante en “v”, las olas. Sus “sprays” sustentan muy bien el moderado peso de esta embarcación con una estabilidad lateral envidiable, sin apenas escoras pronunciadas a la hora de virar deportivamente. Su desplazamiento, decíamos que moderado sin ser ligero en relación a otras propuestas similares en eslora, contribuye a una sensación de seguridad incluso para los más miedos@s.
Sometimos al casco a una navegación dura, buscando el pantocazo deliberadamente. Si, el casco se mostró muy rígido, fuerte como una roca. Llegó el turno de surfear con las olas, montándonos en ellas y bajándolas usando la extraordinaria reserva de potencia de los 115 Hp del Mercury. Como una tabla de surf, pero sin ladear, bajábamos las olas sin que nadie en el puesto de gobierno y en la bañera se mojara.
Sensibilidad, la que debe tener toda embarcación de planeo, al trim. Ello contribuyo a alcanzar los 32,5 nudos de velocidad máxima a un régimen de 6.800 r.p.m., lo que nos alertó que el montaje no estaba suficientemente afinado ya que no podríamos superar, en teoría, las 6.400 vueltas máximas que marca el gigante norteamericano. Un mayor paso de hélice probablemente hubiera repercutido en una mayor velocidad punta, absolutamente innecesaria por otra parte, y en una mayor capacidad de aceleración de los ya de por si buenos 4 segundos a planeo y 14 a velocidad punta con un régimen de vueltas más adecuado.
Creemos firmemente que 115 Hp son los adecuados. Todo lo que sea incrementar la potencia hasta los 150 Hp máximos que recomienda el astillero, es añadir potencia y costes de compra porque sí, aunque reconocemos que 150 Hp los podría soportar bien, entendemos que por encima de los 35 nudos en una eslora de 5,95 m es, son a todas luces, absolutamente innecesarios.
A pesar de ese pequeño contratiempo, establecemos una velocidad de crucero económico a 17 nudos y otra un poco superior a los 21 nudos, lo cual está muy bien para hacer trayectos costeros a los rincones de la costa menos visitados. La Koper 19 busca el planeo pero no agacha la proa hasta que no se alcanzan las 3.000 r.p.m., registro normal y habitual. Una vez asentada longitudinalmente, la Koper 19 se mantiene muy bien horizontalmente “escupiendo” bien el agua saliente del casco hacia la mitad de la eslora, ¡cómo debe ser! mostrando suavidad e, incluso, una cierta delicadeza en su deslizamiento hidrodinámico.
En el puesto de gobierno apetece mucho pilotar de pie ya que existe el espacio adecuado para balancearnos bien al son de las olas entre el volante fijo y la butaca de base abatible. Precisamente su base nos permite apoyarnos, sin acabar de sentarnos, trincando nuestros pies en la pared en el leve reposapiés del molde de la pared quedando así parapetados tras el deportivo parabrisas. La palanca del gas, mecánica, está bien instalada aunque para el gusto de este periodista la hubiéramos adelantado un pelín.
Habitabilidad
Koper 19, para una familia tipo de 5
Sólo son seis metros en los que cinco personas podrían ser consideradas como demasiadas… ¡pero relativicemos! Depende en que situación nos encontremos. En plena navegación cinco personas navegan cómodamente, tres en el banco de la bañera y dos adelantados en el puesto de gobierno. A la hora del fondeo, la capacidad giratoria de las butacas que amplían el área total de la bañera, y la posibilidad de estar en el solario de proa o jugar junto a la escalerilla de la plataforma de baño partida y, por supuesto, la cabina que con una altura de 1,45 m y su cama doble, minimiza esta supuesta aglomeración siendo la vida a bordo razonablemente cómoda para una embarcación de tan sólo 5,95 m de eslora que puede ser gobernada con un titulo tan asequible como es el P.N.B. Un interior en el que se puede estibar, bien trincado, un WC químico y que además posee los siempre imprescindibles estantes en las amuras para meter los cachivaches inclasificables.
Detalles como el “chaise longue” de Br., propios de embarcaciones de más porte, son un gran acierto en una coqueta “lanchita”. Su capacidad de estiba queda bien resuelta con los dos cofres de tapa, uno en cada banda, ubicados bajo los extremos del asiento de popal. Todos ellos con sistema de cubeta removible y asas realizadas en cabo. En el suelo la tapa, que debiera tener un pistón de gas, da acceso al depósito en inox. de combustible al lado del cual todavía queda algo de espacio para estibar algún pertrecho más.
En dicha tapa se halla el tintero donde roscar el puntal telescópico en el que va insertada la mesa que debido a su peculiar forma puede ser colocada al gusto en la forma más conveniente según la disposición de los comensales
El acceso a proa por las bandas, aun siendo lógicamente estrecho, no reviste peligro ya que el marco del parabrisas actúa como pasamanos/asidero quedándonos ya luego bajo la protección de los grandes candeleros y sus guardamancebos de las amuras.
El generoso solario con una mullida colchoneta para dos, está franqueado por dos asideros por si alguien decide quedarse en esta zona en una navegación de vuelta a puerto tranquila. El balcón de proa, abierto, hace que hasta la suegra pueda salir/entrar con seguridad al/desde el pantalán con absoluta comodidad y seguridad.
Balance
Koper 19, adaptada a la demanda de estos tiempos
Prueba de ello es la incorporación de un motor fueraborda que reduce notablemente los gastos de mantenimiento y, por supuesto su eslora que facilita el invernaje en “cualquier” rincón de un parking o en lo alto de una marina seca pagando, probablemente la tarifa más económica.
Otra prueba de ello es la posibilidad de realizar otras programaciones de navegación como por ejemplo ir de pesca. Las brazolas son lo suficientemente amplias para colocar más cañeros a los dos que ya se ofrecen como opcionales. De ahí que los cofres tengan su base en forma de cubeta lo que permite retirar el hielo empleado para la conservación de determinadas piezas. Así pues, esta lanchita también puede dar satisfacciones a algunos aficionados a la pesca con un motor que trabaja muy bien a los bajos regímenes que requiere la pesca, por ejemplo, al curricán.
La Koper 19 es austera. Una austeridad perfectamente mesurada por los responsables técnicos de la marca pero con todo lo necesario para disfrutar del mar con intensidad. Para los incorformistas y “bon vivants” Lema Boats ofrece un completito abanico de posibilidades en opcionales para “vestir” más, aunque no mucho más, una embarcación que se ofrece a unos PVP muy atractivos y cuya fluctuación la puede provocar la potencia del motor que se elija.
Una austeridad (no confundir con simplicidad, ¡por favor!) que creemos que es posible vestir algo mejor con alguna mejora, sin duda, en aras de hacer esta interesante propuesta más atractiva si cabe,… Con sólo algunos detallitos más como un pistón de gas en la tapa del acceso al depósito de combustible y que los asideros fueran de acero inoxidable, o hacer algo más bonitos los travesaños de madera de pino usados para colocar los alcolchados de la cama doble, contribuiría a una menor sensación de una austeridad no siempre bien entendida. Aunque a decir verdad, un “chaise longue” y el altísimo nivel de su tapicería ya contribuirán a iluminar la cara del cliente y la de sus acompañantes.
Si nos acojemos a la oferta de lanzamiento de este atractivo modelo actualmente en vigor, el barco sólo cuesta 15.200€ . A ello sólo deberemos sumar el coste del motor fueraborda que elijamos que oscila entre los 21.800 de los 90 Hp de la serie Optimax de Mercury y los 25.300€ de los 150 Hp del FourStroke de Mercury.
Un diseño… menos Lema
Hablar de las formas de los barcos siempre es interesante. En este caso, Lema ofrece una propuesta bastante alejada de su tradicional estética, de enorme éxito, muy atractiva que la han hecho, en definitiva, famosa. La Koper 19 luce un diseño contemporáneo, que nos lleva a recordar a las Glastron de los años 70. Su parabrisas partido, su leve sobreestructura con portillos practicables en cada banda y sus lanzamientos de proa y su popa nos evocan un cierto clasicismo. Un clasicismo “lemamente” contrastado con unos colores potentes que en el mar siempre sentan muy bien. ¿A qué se debe este cambio en Lema? Nosotros lo sabemos,… se trata de agradar más allá de los incondicionales…, ¡que son legión!