Esta asociación, me explica Josep Maria Bertrán, surgió a partir de su preparación para realizar el examen PPER, -en su primera convocatoria-, que, como se sabe es el certificado que permite poder ejercer profesionalmente a los Capitanes de Yate, tanto en el mar como en la formación en tierra para obtener, fundamentalmente, titulaciones de recreo y de radio.
Con la puesta en marcha del certificado PPER, Josep Maria -que es un tipo dinámico, inquieto y con “trempera” 😉- vio la absoluta indefensión y los posibles problemas venideros de una nueva actividad nada regulada en aquel momento, ¿verdad?
¡Exacto! Mientras me preparaba en algo totalmente nuevo y me di cuenta que más temprano que tarde nos encontraríamos con una serie de problemas, una serie de carencias, con una serie de cosas que a nivel privativo se podrían atender, tanto para peticiones a la Administración como para quejas (¡o no!) pero que indudablemente lo haríamos mejor como asociación. Me dijeron: ¡Tienes razón! Quedamos unos siete o u ocho Capitanes de Yate en el 2010 en la Escuela Náutica el Masnou y allí constituimos la asociación… ¿y quien debe ser el presidente? Todos me señalaron a mí…
Pero, Josep Maria, ¿de dónde surgió la iniciativa de este certificado profesional PPER para los Capitanes de Yate? ¿Fue antes que tú?
Sí. Y hay mucha gente que se lo quiere atribuir. Y si, había una necesidad. Era evidente que faltaba “un patrón para el chárter”. De hecho, en una reunión que se mantuvo a nivel mediterráneo, el propio Jefe del Área de Titulaciones Profesionales ya dijo que “se tenía que regularizar” ya que, quien ejercía la actividad eran los titulados de la marina mercante y claro, no eran suficientes para cubrir la creciente demanda. Es por ello que se habilitaron a los Capitanes de Yate para poder ejercer…
Y yo añado, para combatir lo que se hacía de “estranquis”, ¿no?
(caso omiso al comentario)… y en el 2017 gracias a la ANPPER nos incrementaron las atribuciones y, ¡bueno!, continuamos, ¿no? De esos fundadores sólo quedamos tres como socios fundadores. Rápidamente me fui a Hacienda para pedir que, como asociación sin ánimo de lucro, los asociados no tuvieran que satisfacer el IVA en sus cuotas.
Hay unos 5.000 PPER en España según he leído…
¡Yo creo que hay más! Y por convalidación se añadieron patrones de altura… Aunque yo pedí los datos por escrito a la DGMM y salían unos tres mil y pico…
¿Y de asociados a la ANPPER?
¡Pocos…! (largo silencio mientras diseccionamos y zampamos nuestros respectivos pescados)
¿Y?
Por lo menos tendríamos que ser un 20, 30 ó 40% de Capitanes con Certificado PPER asociados. La gente cuando me ve me dice: ¡Hombreeeeee presiiiii, gracias por todo lo que estás haciendo por nosotros…! ¡Pero no nos asociamos! Claro, 50€ anuales de cuota, es demasiado.
La gente huye de los gastos fijos…
Pero para comer con los amigos o para irse de copas, o para…, ¡sí se los gastan!
Josep Maria, aunque no sea socio… todavía…
(Risas)
…miro a la ANPPER como la “patronal” de los Capitanes con PPER, más allá de los ANEN,… ¿no?
Es curioso lo que me estás diciendo porque estamos asociados a ANEN. Desde el momento que un PPER tiene un barco en lista 6ª y lo explota es ya una empresa náutica… La náutica es un pañuelo. Sí que hay algunas asociaciones de nombres reconocidos y centenarias como puede ser la Real Liga Naval y la RAECY y otras…, en las que estoy asociado, no parecen que hagan mucho por la náutica de recreo profesional, no piden mejoras, no piden cosas,… y los que realmente hacemos cosas en beneficio de todos, estamos menos reconocidos. Es la parte que a mí me cuesta de entender teniendo en cuenta que sus cuotas además son más que el triple que las nuestras… Nosotros estamos favoreciendo con más atribuciones, que no sea necesario estudiar certificados de especialidad que no nos atañen para nuestra actividad, vamos que estamos ahorrando mucho dinero a la gente (cursos, desplazamientos, hoteles, renovaciones, etc.). Nuestra actividad ha provocado que, por ejemplo, también, hayan surgido un montón de escuelas náuticas gracias al PPER.
Debe decirse que desde Anen nos han ayudado mucho y nos hemos ayudado mutuamente. Ellos tocan muchas cosas y yo voy a asuntos muy concretos. Nos tenemos que ayudar cosa que ya hacemos.
Cuál ha sido el hito personal con la ANPPER que mayor satisfacción te produce
Ha sido todo. Por ejemplo, el hecho de impartir clases de vela y poderlas firmar, fue una lucha de varios años. Yo llamaba (a la Administración) y les decía que “quién mejor que los que vienen de la náutica de recreo para enseñar vela cuando tienes entendido -y creo que no me equivoco- que no hay ningún curso específico de vela en la Facultad de Náutica ni en las FP. Un jefe una vez dijo: Oye José María, entiéndelo, es que no hay ningún sitio en donde esté escrito que vosotros (los PPER) podáis impartir clases de vela oficialmente. Y dije: Ya está, ¡te cuelgo! ¡Cómo que me cuelgas! ¡Sí, te cuelgo y te envío un correo electrónico! Entonces le escribí un mail que decía: Sr tal, con su cargo, quisiera saber dónde está escrito que un Capitán de la Marina Mercante pueda impartir clases de vela… He tardado tres años para esto Erik. Esto era falta de voluntad. Bueno, en la DGMM hay muchas personas eficientes y con ganas de trabajar, pero hay mucha sobrecarga, se tocan muchos temas, hay poco personal,…
¿Y otros logros…?
Pues mira, otros logros que hemos conseguido son solventar problemas específicos a personas que lo tenían. Estas personas me han hecho llorar por teléfono al comunicarme que se habían resuelto.
…Siempre ayudando a socios… ¡y a no socios!
Justo. A veces me he dado cuenta, de gente que te llama o incluso en las RRSS y ves ¡qué perdida está esta persona! Te pones en contacto con ella, les pides el teléfono y la ayudamos. Y te dicen, “gracias a ti lo hemos conseguido o gracias a ti me has solucionado un problema”.
Cuál es la demanda más significativa a la DGMM aún vigente en su petición desde la ANPPER
Uy, tenemos varias. Que el PPER sea un titulo reconocido por la STCW (“Standards of Training, Certification, and Watchkeeping”, que en español significa estándares de formación, certificación y vigilancia. Se trata de unos estándares para la formación básica de la gente de mar, que acordaron los gobiernos por primera vez en 1978) a nivel internacional y que se pueda ir con la cara bien alta más allá del certificado actual. No lo pedimos por nuestra cara bonita. Ponemos unas condiciones ya que queremos que sea un título “chapeau”. Y probablemente a muchos nos les gustará. A parte de todo lo que estudiamos como Capitanes de Yate con una navegación ilimitada con barcos hasta 3.000 GT, yo quisiera que hubiera un examen práctico adicional en el PPER tanto paro los procedentes de la náutica de recreo como para los que convaliden. Hay personas con facilidad para estudiar y en un año se lo sacan todo. Pero falta la práctica… que es lo esencial y es donde se falla por muchas regatas que se hayan realizado. Un patrón tiene que tener una figura muy respetable y de autoridad. Por que hay muchos tipos de PPER. Los que solo se dedican a la enseñanza, el que navega con lanchas de 9, 10 m de eslora, los que llevan a una familia. La autoridad bien ejercida a bordo es necesaria a bordo frente a determinados comportamientos de algunos clientes y es necesaria esa imagen para la propia actividad.
También recuerdo que cuando salió el PPER decía “con 12 personas a bordo…” Claro, cada vez que una empresa de day-charter pone, por ejemplo, un marinero, se pierde un cliente. ¿A si? Pues lo pregunté en la DGMM: nosotros, -dije en una visita a la DGMM- ¿cuántas personas podemos llevar a bordo? 12 y no me pidas más José María, no puede ser. Si yo no te he pedido nada, contesté. ¡Yo te he preguntado cuántas personas podemos estar a bordo! Me contesta: 12. Bien, ahora dime la definición de buque. Y me contesta: buque es toda embarcación que lleve a más de 12 pasajeros. ¿Habla algo de la tripulación? No. Entonces dije que nosotros lo que queríamos es 12 pasajeros más la tripulación adecuada y lo que queríamos también es que no sea necesario realizar el certificado de buques de pasaje, al igual que el avanzado contra incendios y el de buques de rescate, por razones obvias. La respuesta, siempre con cariño, fue ¡eres un cabrón! El lance fue así, no para burlarme de nadie, sino para ilustrar gráficamente ciertas incoherencias que se entendieron en el acto.
Muy hábil Josep Maria… y en nombre de muchas empresas y autónomos, ¡gracias!
Un PPER tiene una responsabilidad a bordo muy importante. Por desgracia hay muchos patrones que no lo tienen en cuenta. Hay que lidiar con algunos clientes muy difíciles que pueden traer consecuencias nefastas como aquél que se quería bañar a toda costa en un momento especialmente inapropiado… El PPER debe ser, más que un certificado, un título que transpire una autoridad incontestable, acorde con las responsabilidades que conlleva y demostrar una profesionalidad.
Sr. Bertrán, ser profesional PPER es un mundo…
(el Presidente de la ANPPER está en racha…!) Tanto puede ser un PPER contratado para hacer la temporada de un armador, como el que trabaja en una escuela… Estaría muy bien que un PPER 2 (navegar hasta las 150 millas con 12 pasajeros) pudiera impartir clases hasta Capitán de Yate. A mi ya me han dicho que si “desde arriba” pero para ello hay que modificar 3 Reales Decretos… Imagínate el follón. Por ahora los PPER ahora solo pueden dar clases hasta PER y claro, les es insuficiente. Entonces es cuando “se contrata” a una persona que puedan firmar esas clases y yo, como lo sé todo, pues sé que las clases las da un PPER y que firman algunos que no han ni ido a aquel centro.
(silencio largo ya en los postres)
(rompiendo el silencio) Déjame decirte que gracias a los PPER se han creado unas escuelas de navegación a vela muy interesantes, dinámicas y muy visibles en las RRSS…
¡Cierto! Creo que la gran beneficiada de los PPER es la industria náutica en general. Con el PER mucha gente se da cuenta de lo maravilloso que es el mar y la navegación, creándose un pozo muy interesante en nuestro sector muy oportuno. Se puede pasar del “qué bonito” a la compra de un barco. En fín,… ¡Nosotros seguimos trabajando desde una asociación sin ánimo de lucro para mejorar la actividad de todos los Capitanes de Yate con el certificado profesional PPER y con la meta de que se convierta en un título y que se aúnen a nosotros los titulados de FP que, en definitiva es en lo que trabajan y no en el mundo de la pesca profesional.