General
Probamos la Highfield Patrol 760 en aguas del puerto de Premià en Barcelona de la mano de Highfield Spain. Sin duda otra exquisitez de esta marca australiana en la navegación en términos de comodidad y prestaciones ideal para usos profesionales.
Textos, fotos y clip testimonial: Erik Tarrés Lenneryd
En todos los portfolios de cualquier marca de embarcación, hay modelos que navegan unos mejor que otros. Ello no significa que algunos modelos tengan un mal navegar o no alcancen las prestaciones que se les presupone. Nos referimos a que siempre hay modelos que sobresalen por encima de la media de los modelos que puedan componer una gama. Suele ocurrir que ese modelo, como es el caso del Patrol 760, destaque por encima de los otros modelos precedentes. El que escribe habla con fundamento ya que ha probado en más de una, dos o tres ocasiones, diferentes opciones de la marca Highfield. Debemos reconocer que la Patrol 760 es uno de estos casos en la que, sin duda, la elección de la potencia precisa, ha ayudado en esa percepción. También está disponible en su vertiente más de recreo: es la 760 Patrol Sport.
Navegación
Highfield Patrol 760: con 200 Hp de Honda, ¡equilibrio perfecto!
Los 200 caballos sabiamente instalados en la Patrol 760 nos demuestra que aunque la potencia máxima aceptada sea superior (300Hp), no es necesario incrementarla por que sí. 200 caballos nos batan para obtener unos rendimiento magníficos con un pilotaje deportivo. Decir que esta unidad que probamos va a participar en el conocido Raid Dragonera para semirrígidas.
Con un 24% de combustible de un total de 285 L y 0% de agua, 4 personas a bordo y una suave brisa de tierra de 12-13 kn, nos disponemos a probarla. El Honda V-TEC de 200 Hp responde con finura a las exigencias desde la palanca. Para entre¡ar en calor vamos acelerando progresivamente. En los 15 nudos de velocidad (2.800 r.p.m.) “busca” el planeo. A 19,2 nudos planemos a la velocidad minima posible, lo cual está muy bien. Vamos a por su velocidad de crucero suave que establecemos e las 3.500 vueltas, esto es a 26 nidos con un consumo de 62,4 L / h. Vamos subiendo… Los 30 nudos (4.000 r.p.m.) son cómodos para los dos que vamos en los asientos tipo “jockey”, opcionales sin amortiguadores de la propia Highfield, y para los colegas que están en los bancos de su amplia bañera. Vamos subiendo… Velocidad cricero rapidilla a 35,2 nudos (4.500 r.p.m.) que permite hacer buenas tiradas sin sufrir para nada por las cervicales. Navegación suave, amerizajes dulces. El agua se ptoyecta bien por las bandas. Sequedad absoluta. Bien! Seamos algo golfos… y exprimimos la Patrol 760 a los límites. ¡Como si nada! Seguridad objetiva absoluta y sensación de seguridad… ¡también absoluta! Vamos a 37,5 nudos (5.000 r.p.m.)… 39 nudos (5.500 r.p.m.)… 43,5 nudos de máxima a 5.800 r.p.m. ya que el motor está limitado expresamente dado que la Patrol 760 Highfield aún no tiene armador. En las 6.000 r.p.m. habituales de régimen máximo la velocidad estaría cercana a los 46-47 nudos y trimando bien el motor probablemente en los 48…
Cómoda, suave, dulce…
Una vez sabidas sus capacidades en lo que a prestaciones se refiere, iniciamos la sesión de viradas y contraviradas, cambios de régimen, aceleraciones,… ¡Lo divertido! Constatamos un navegar suave. El casco tiene la forma de “V” bastante acentuada (24º) necesaria con lo que no hay brusquedades, sino todo lo contrario: dulzura en los amerizajes tras los “flights” que realizamos con un mar de fondo residual. Surfeamos las olas y la proa no pincha las olas en las bajadas gracias a los redanes que actúan bien. Las viradas en largo a alta velocidad son seguras y se percibe el agarre en cada uno de ellas conforme las vamos cerrando. Ni un ápice de cavitaciones y ventilaciones. La rigidez estructural que ofrece el aluminio contribuye al máximo aprovechamiento de la potencia ya que apenas se disipa la fuerza propulsora con la sinuosidad del mar. Los ángulos de escora son seguros y recordemos que al estar en una semirrígida, los tubulares siempre ponen un límite haciendo sencillamente de tope con el agua. En navegación rectilínea la parte trasera delos mismos no tocan el agua con lo que se evita un rozamiento innecesario.
Las personas sentadas atrás en la bañera aún teniendo puntos de agarre observamos que ni se preocupan por ello yendo a una velocidad de 30 nudos. ¡Eso es una gran señal de solvencia marinera y de seguridad! Los asientos tipo “jockey” son poderosamente atractivos y cómodos oara navegar rápidos. Existen otras opciones sin embargo, como los asientos de apoyo o los bancos de toda la vida. El parabrisas, muy vertical y de estilo clásico, es efectivo desviando el viento y el plano inclinado de la consola del gobierno adecuada para visualizar bien el instrumental de navegación. Nos gusta mucho los asideros en los extremos de la consola realizados con un tubo de buen calibre donde agarrarse estando de pie es agradable incluso al tacto.
Habitabilidad
Habitabilidad. Espacio generoso
Los 7,60 m de eslora ofrecen en esta Patrol 760 mucho espacio para la vida. En proa se puede conformar un solario para dos incluso tres al hinchar a alta presión una superficie que hará de base y que no tenemos disponible para probar. En la pared de la consola de gobierno, se ha instalado un asiento, lugar privilegiado en las navegaciones regímenes suaves y mar tranquila.
El puesto de gobierno ofrece un reposapiés integrado que sólo será útil en cualquier otro formato de asiento que se ofrecen excepto los de tipo “jockey” montados. La bañera es amplísima dado que se ha prescindido de la colocación de bancos laterales. El existente en popa, recto, es enorme pudiendo caber tranquilamente 5 personas bien, quizás 6 apretadas. Los respaldos tienen una altura adecuada y se pueden retirar para facilitar el tránsito hacia la pre-bañera para tiranos al agua. La Patrol 760 que probamos carece de plataforma. Es lo que ocurre cuando el modelo está concebido para el uso profesional. El arco portaradar facilita transitar bien por aquí al poder agarrarnos a él. Si se ofrecen las plataformas en su versión más lúdica como la Patrol 760 SPORT.
Su capacidad de estiba se concentra en los dos cofres de proa, cuyas tapas están ubicada en forma de escalón, facilitando la salida hacia el pantalán, en el espacio que queda libre al levantar la tapa (con el asiento incluido) de acceso a la cableado de la electrónica por la parte delantera de la consola de gobierno, y al megabanco de popa que esconde un cofre en el que se pueden estibar algunos pertrechos junto a baterías y otros servicios. En la proa, junto a la boca de llenado del combustible advertimos una anilla en textil para estibar un bichero.
Balance
Highfield Patrol 760, calidad y detalles marineros
La versión profesional a la que nos estamos refiriendo es, sin duda, ideal para la explotación comercial. Los siento tipo “jockey” se puede instalar en varias hileras tanto para ofertas de ocio turísticas de paseo como para otras opciones profesionales como el asistir o dar cobertura mediática a eventos náuticos. De ahí que Highfield no deje de patrocinar multitud de regatas oceánicas llevando a reporteros y cámara de TV. La unidad que probamos realizó este cometido para la pasada regata Ruta de la Sal y de ahí este distintivo en sus amuras.
La estela dejada por popa de la marca empieza ya a ser considerable. La marca australiana tiene un gran prestigio internacional y en España las ventas son muy importantes. Y es que además de ofrecer un navegar muy bueno con excelentes prestaciones, al astillero se le percibe el alma marinera en multitud de detalles. Desde la gran bita/noray de su proa con la protección adecuada para el tiro de los cabos sobre el neopreno-hypalon, hasta el cáncamo multiuso soldado en su roda protegida o la ubicación de las cornamusas soldadas en popa. Más detalles: los imbornales en la bañera están en el suelo y no en la pared del banco, lo que es más eficiente. El cintón de los tubulares es doble y muy robusto y, existe, además, un orificio en la consola para inyectar el extintor en la zona del cableado por si hubiera un incendio.
La calidad de Highfield en el proceso de construcción en aluminio es que es anodizado de toda la estructura del casco, es decir, una vez finalizada la soldadura de las partes, se sumerge en 5 baños por inmersión. Es la única marca que realiza este proceso industrial en sus propias instalaciones. Otras marcas lo hacen, pero luego al soldar las zonas de estres, éstas pierden sus propiedades propiciando la corrosión. El pintado es otro de los puntos fuertes de la marca. Se pinta con polvo de pintura que luego la temperatura de unos grandes hornos cuece. El resultado es uniforme, parecido a la estética de la cerámica y con una durabilidad extraordinaria.