El Ann G ha sido entregado a sus dueños este mes con la certeza de haber creado un yate de excelentes prestaciones y gran resistencia. Su casco de acero ha sido probado intensamente en el Mar del Norte en condiciones de mar plana donde el barco alcanzó una velocidad máxima de 15,6 nudos.
Arcon Yachts, firma que ha gestionado la construcción del proyecto comentó: “El armador del Ann G es un cliente con altas expectativas y estamos muy satisfechos con el resultado. El yate es la quintaesencia de la personalización y la excelencia, con gran atención a los detalles; presenta un diseño deportivo y vigoroso pero al mismo tiempo elegante que hará girar cabezas dondequiera que vaya”
En este sentido, el yate trata de representar también la personalidad de su armador y por ello incorpora elementos de diseño complejos y extremadamente refinados en las líneas exteriores, que han sido perfectamente elaborados por Heesen.
El equipo de diseño ampliamente reconocido Raymond Langtony ha creado unos interiores audaces que se caracterizan por una rica profusión de la madera de ébano de Macasar. El concepto se acentúa por los detalles en acero inoxidable, el Art Decó y la retroiluminación que enfatizan el lujo y propician una refinada atmósfera.
A bordo el barco ofrece el confort y la intimidad que se exige a un yate de estas dimensiones. La suite del propietario, en la parte delantera de la cubierta principal, cuenta con una oficina privada, un dormitorio a toda manga y un cuarto de baño con áreas diferenciadas e independientes para él y para ella.
El Fly cuenta con un salón informal dentro de un ambiente íntimo con un gran espacio abierto mientras que la zona “beach club” situada en la cubierta inferior es de estilo más contemporáneo, incluyendo un espacio polivalente dedicado a la relajación, con zona de gimnasio, baño de vapor, bar y zona relax.
Las principales maderas de esta zona son paneles de olmo combinados con el suelo de teca para crear un ambiente cálido y relajado.
El Ann G estará en exhibición en el Mónaco Yacht Show.