La asturiana Angela Pumariega -medalla de oro en la modalidad match race en los Juegos de Londres 2012- y que forma tripulación con la grancanaria Patricia Cantero desde octubre de 2013 están en plena campaña de venta de unas pulseras que servirán para sufragar los gastos de su campaña olímpica.
Angela (Real Club Astur de Regatas) y Patricia (RCN de Gran Canaria) compiten en la clase 470 y tienen dos objetivos claros en 2015: clasificar a España para los Juegos Olímpicos de Río 2016 y meterse en el equipo preolímpico (en vela sólo compite una tripulación por país de cada clase de barco y categoría).
Lo primero se verá en el Mundial de Israel que tiene lugar en octubre, lo segundo acabará de decidirse en el Trofeo Princesa Sofía, que se celebra entre marzo y abril en Palma.
Con la venta de las pulseras sufragan los gastos de material del barco. Hay que tener en cuenta que cada vez que Ángela y Patricia hacen una compra de cabos no invierten menos de 100 euros, ésta es la suma que obtienen por la venta de 20 brazaletes.
La historia de los brazaletes
La historia de las pulseras empieza en 2012, tras los Juegos de Londres, la modalidad match race deja de ser olímpica y Angela decide pasarse a la clase 470. Tiene una amiga, Janet Schulz, compañera de los tiempos en la clase snipe, que diseña abalorios y que se ha hecho famosa por regalar una pulsera a los futbolistas que ganaron para España la Eurocopa 2012, y que en los Juegos había regalado otra a cada uno de los miembros del equipo español de vela.
“Como nos había dado suerte en Londres, juntamos esa idea con nuestra falta de liquidez y le propusimos a Janet qué le parecía hacer una colección para mi equipo que en ese momento que era con otra chica”. Así nace la colección Pumariega Team.
Familiares, amigos, regatistas, periodistas, el circuito … “Al principio la gente compró pulseras por ayudarnos, pero después la idea gustó”, afirma Pumariega.
Patrona y tripulante entrenan durante la temporada de invierno en el RCN de Gran Canaria, con sesiones intensas de hasta ocho días de agua para permitir que tanto Angela, como su entrenador, el grancanario radicado en Santander y ex regatista olímpico Aarón Sarmiento, puedan escaparse a casa de vez en cuando.
“La cuestión es entrenar muchas horas, estamos mejorando mucho, pero nos falta asentar los conocimientos. A veces perdemos regatas o puestos por fallos nuestros, propios de nuestra inmadurez como tripulación y en la clase. Nos falta un poquito: afianzar todo eso y avanzar como equipo para logara el objetivo en octubre”, señala.
El objetivo es “el sueño”, en palabras de Patricia, de llegar a una olimpiada.