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Cuando a partir de un determinado momento de la regata como la Vendée Globe la comida fresca se ha acabado y la poca bebida envasada se reserva únicamente para la celebración de determinados momentos, léase, por ejemplo, la negociación de los cabos de Buena Esperanza, Leewin y Hornos, la salud depende de una correcta alimentación liofilizada en la que el agua es un ingrediente básico para ser ingerida.
El agua esencial para beber… ¡y comer!
La liofilización es un proceso de conservación de los alimentos en el que se congela y se descongela el alimento pasando por el vacío y a presión atmosférica baja. El resultado es un alimento similar al deshidratado, sin agua, que se puede conservar durante mucho tiempo.
Actualmente cada vez encontramos más snacks para comer a media mañana o a media tarde en base a fruta o verdura liofilizada. Productos liofilizados los encontraremos en frutas, verduras, especias, café, algas, chocolate, especies e incluso platos enteros como los que lleva Dídac.
Los platos enteros liofilizados, como una pasta al roquefort, suelen ser en polvo con, a lo sumo, algunos tropezones. Los platos liofilizados actuales son muy sofisticados y cada vez más sabrosos y equilibrados en su composición y conservan un más que aceptable sabor original.
Pero, ¿cómo se preparan? Pues siguiendo las instrucciones de cada fabricante… ¡con agua! Normalmente se suele echar en el sobre la proporción de agua caliente que indique el fabricante. Agua con la que luego debe agitarse el sobre cerrado para que los polvos se mezclen bien, evitando, en la medida de lo posible, los desagradables grumos. Pasado un tiempo concreto, estipulado por el fabricante y la experiencia de cada uno, -unos minutos- ya está listo para comer. En las circunstancias de navegación de Dídac, lo más probable es que la pasta al roquefort se la coma con una cuchara, probablemente el único cubierto a bordo, y desde la misma bolsa. No sabemos si Dídac lleva jamón envasado al vacío tal y como suele hacer Àlex Pella, pero lo más seguro es que en las latitudes 40S estos platos “instantáneos” le sabrán igualmente a gloria.
Como podemos ver, la producción de agua es esencial en los algo más de tres meses que va a necesitar Dídac para circunnavegar la Tierra. Otras aplicaciones del agua de mar probablemente sean para hacerse sus cafés o tes, o para el aseo personal, que siendo importante, lo es en menor medida.
Potabilizadora Splash 25 de Eco Sistems
¿Y por qué Didac ha confiado en una diminuta potabilizadora -de ósmosis inversa- de EcoSistems Watermakers? Lo que más desea un navegante es tener la mayor confianza en los materiales que usa. Por este motivo probablemente el portfolio de productos de esta marca que ha sido desarrollado por gente de mar, por navegantes, haya jugado un papel emocional importante en la decisión. Pero probablemente lo más mportante en esa decisión haya sido la sencillez y la facilidad de reparación del equipo elegido. Algo fundamental para no andarse con chiquitas en caso de fallo momentáneo.
Ello significa, por ejemplo, que la Splash 25 que Dídac lleva a bordo no posee ningún elemento electrónico, o que la limpieza del filtro de carbono mediante membranas es sumamente sencilla ya que posee una válvula de tres vías de accionamiento manual. Otro factor es por su bajo consumo, en 12 ó 24 v. D.C. que además posee una capacidad de producción efectiva de 25 a 30 L/hora, mas que suficiente para Dídac. Su tamaño francamente compacto y su peso moderado habrá pesado en esa decisión dado que en un barco IMOCA cada elemento que se incorpora con su peso, se audita y se instala en el sitio adecuado disponible que suele ser pequeño.
¿Cómo se potabiliza el agua salada?
El proceso se realiza aspirando agua salada a la que se le somete a un proceso llamado osmosis inversa. ¿Inversa? Si la ósmosis (no inversa) es un fenómeno físico consistente en que un líquido traspasa una membrana (celular o de cualquier otro tipo) que separa dos líquidos con diferente concentración de elementos, entre ellos la sal. Suele ser un fenómeno natural en que el líquido con menor sal tiende a buscar el equilibrio entre ambas soluciones separadas por una membrana.
Un ejemplo muy ilustrativo de las consecuencias de la ósmosis en nuestras células es que si bebemos agua de mar, el agua con menos sal de las células tiende a traspasar naturalmente la membrana celular para buscar el equilibrio osmótico entre el interior y el exterior de las células, provocando la deshidratación de las mismas y de ahí el fatal desenlace en el cuerpo humano ante una continuada ingesta de agua de mar. La deshidratación, como cosecuencia de beber agua salada, se produce por un fenómeno osmótico natural.
Pero la osmosis inversa se produce cuando se aumenta la presión del lado de mayor concentración de elementos en el agua (fundamentalmente sales) lográndose que el agua pase del lado de alta concentración al de baja concentración de sales dejando en la mebrana semipermeable las sales y otros elementos. Es decir, si la alta concentración es de sal, por ejemplo agua marina, al aplicar presión artificialmente, el agua del mar pasa al otro lado de la membrana. Y solo el agua, no la sal. Es decir, el agua se ha desalinizado por ósmosis inversa, llegando a ser potable.
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