“Hay un jurado y sus decisiones son las que cuentan. Las acatamos con máximo respeto y no queremos entrar en ningún tipo de polémica. Mi corazón me dice que tengo razón, pero esto es deporte y la disciplina es importante”. Son palabras de Mikael Creach, patrón del Moonbeam 4 (1914), barco que fue descalificado en la prueba del viernes a causa de una protesta presentada por su máximo rival, el Mariquita (1911). El patrón del barco inglés denunció que, antes de la salida, el Moonbeam 4 utilizó el motor para posicionarse intentando salir de una línea de hipotética colisión. El Mariquita ya se ha adjudicado la XI Copa del Rei Panerai en la clase Big Boats, con independencia del resultado que obtenga hoy.
Creach califica de “muy frustrante” el hecho de que el Comité les descalificara una vez terminada la regata de ayer pero insiste en que “esto forma parte de la competición”. “No pienso discutir. Además, estoy muy orgulloso porque hicimos la mejor regata de nuestra vida. Casi cuatro horas de luchar barco contra barco (precisamente contra el Mariquita) fue una experiencia inolvidable. Siempre pegados, siempre peleando, con agresividad, nobleza… Creo que vivimos un día inolvidable para la historia del Moonbeam. Y eso que, personalmente, llevo muchos años en esto…”
El Moonbeam IV (1914) tiene tripulación fija, pero para las regatas se nutre de regatistas locales. “Somos amigos y todos tienen una ilusión increíble por ganar. Esto cuenta mucho. Cuando navegamos con la tripulación habitual también lo hacemos, claro, pero nos movemos como una orquesta… Con estos amigos es un poco diferente, digamos que hay mucho corazón”, dice Mikael Creach, quien remarca que “en el Mariquita (1911) toda la tripulación es profesional, cuenta con winches, mientras que nosotros todo lo hacemos a mano…”
La rivalidad entre el Mariquita (1911), que patronea George Newman, y el Moonbeam IV es, según Mikael Creach, “ancestral”. “Viene de muy atrás. Tengo 46 años y llevo toda la vida en el mundo de la vela. Siempre lo he vivido. Y puedo asegurar que esta rivalidad no es un simple juego”
Creach, nacido en Bretaña, afronta la última regata de la XI Copa del Rey Panerai “con toda la ilusión del mundo”. ¿Si vamos a salir a pasearnos? En absoluto. Vamos a ganar. No nos queda otra. No tenemos elección, debemos ganar y levantar la cabeza”.