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Qué poco se imaginaba este periodista que con un video testimonial en la sección Yacht Brokerage TV de panoramanautico.com se diera paso a un reencuentro tan bonito, emotivo y hasta “beneficioso” para la conservación del patrimonio marítimo.
Decimos bonito porque la historia es preciosa, emotivo porque para Yolanda ha supuesto revivir recuerdos de una parte importante y feliz de su vida y beneficioso para la conservación del patrimonio marítimo balear, ya que nadie mejor que ella y su marido Bernardo Oliva para garantizar su conservación y su transmisión al futuro, y gracias también al compromiso de sus descendientes. De hecho, fue su hijo Andrés Oliva Llinás a quien le llegó el video de la “Barbiana” a través de nuestro newsletter mensual al cual está suscrito.
Una barca que, curiosamente, también ha formado parte de la vida del que escribe, ya que la “Barbiana” (barbián, na: adj. Desenvuelto, gallardo, arriscado) ha estado siempre presente en mi universo juvenil desde que ésta apareció en un ya lejano 1983. Hablamos de una época en que en Cadaqués todavía era posible memorizar el nombre de cada embarcación amarrada a su boya relacionándola con sus propietarios. De un tiempo en que todavía dominaba la madera sobre la fibra de vidrio, el llagut sobre la semirrígida, justo antes del “boom” de la náutica en nuestro país. Sí, la “Barbiana”, desde los ’80 ha formado parte del paisaje “en la rada con más boyas ilegales de España”, según se dijo en su momento desde la DGMM.
Debe decirse que se trata de una embarcación que siempre ha estado activa, navegando normalmente a motor por la tortuosa costa del Cabo de Creus, en la Costa Brava más salvaje fuente de inspiración de Salvador Dalí, y siempre azotada por la Tramuntana. Si su roda hablara…
La llamada
Se me pusieron los pelos de punta el día en que Yolanda Llinás, referencia del periodismo náutico especializado de este país, y antigua compañera de redacción en la revista Skipper, me llamó preguntándome dónde estaba en concreto su “Barbiana”, en qué estado creía yo que se encontraba y quién era el bróker que la tenía a la venta.
Tras unas breves explicaciones, me relató con emoción unos primeros recuerdos familiares a bordo de esta balandra de popa redonda aparejada, tanto ahora como originalmente, en yawl. Me di cuenta que la “Barbiana” era algo importante para Yolanda, mucho más que cualquiera de las muchas embarcaciones que Yolanda y Bernardo – su marido- han tenido.
Uno que es sensible con el patrimomonio marítimo, por ser depositario también de una buçeta construida en los 40 en Cadaqués, se apresuró a dar todos los detalles y referencias posibles acerca del hallazgo que, dicho sea de paso, se produjo estando la barca a la intemperie. Estaba trincada de mala manera encima de un remolque frente a las instalaciones para el invernaje que Quico Despuig, de Drassanes Despuig y de las de Ramón Morales, -el boligrafo- al cual agradezco mucho su permiso para grabar el dichoso video.
A partir de ese momento me aparté cautelosamente de la negociación en el proceso de compra por parte de unos amigos y del proceso de venta por parte de los “otros” amigos. Y dejé pasar el tiempo hasta cuando me interesé por el desenlace, siendo grato constatar que finalmente se había llegado a un acuerdo tras una no fácil negociación. Como suele ocurrir a menudo parece ser que el vendedor quería legítimamente recuperar el máximo posible la cantidad de dinero de la embarcación que, en este caso, era lo que se pagó en… ¡1983!
Como suele también pasar, los que venden no tienen en cuenta que la venta de embarcaciones de madera, especialmente los de diseño tradicional, o las denominadas “de trabajo”, tienen un mercado potencial muy restringido por los costes de mantenimiento y las incomodidades propias de las periódicas puestas a punto. Así que, desde luego, la aparición de Yolanda y Bernardo en escena debe considerarse también un golpe de suerte para el vendedor… aunque a veces se diga que el dinero no entiende de emociones. El acuerdo finalmente llegó de una manera razonable para todos garantizándose lo más importante: el futuro de la “Barbiana”.
Un periplo con salida y llegada a Cala Ratjada
Cuando la “Barbiana”, tras unas revisiones, pudo navegar por si misma resiguiendo la costa hasta Barcelona, quedamos con “la Llinás” y su marido en el RCNB. Allí anoté y grabé las emociones que a borbotones emanaban de mi colega al hablar de ella, mientras ésta estaba plácidamente amarrada entre veleros modernos esperando a ser trasladada a Mallorca.
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Curiosamente esta barca “siempre ha estado muy presente en mi familia, hasta el punto que siempre también, ya de casados Bernardo y yo, habíamos fantaseado y soñado con encontrar la barca que Miquel Rosselló “el pollencí” había construido por encargo de mi abuelo y mi padre en 1948”.
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“Habíamos tenido referencias suyas de su paso por Arenys de Mar en Barcelona al coincidir, muy poco después de su venta, con el Juez Clemente Vidal, fue fundador del C.R.I.S. (Centre de Reçerca i Investigaciò Submarina)”.
“Antes de él, la había tenido también en el mismo puerto el célebre divulgador y pionero del submarinismo Eduardo Admetlla”, según nos apunta Bernardo Oliva. También ha quedado constancia de que pasó fugazmente varias veces por el Real Club Náutico de Barcelona en los años 50 y 60, según el registro del club.
En 1975 la “Barbiana” cambió nuevamente de manos. Y los señores José Soldevilla Vallés y José Plá Matter de Barcelona, fueron los que finalmente la vendieron, en 1983, al alemán Hartwig Wilhelm Benedict, el cual la conservó bien en Cadaqués y en su estado original, instalándole el último de los motores, un Nanni de 37 caballos de segunda mano todavía operativo.
Al hablar de recuerdos, sin duda muy numerosos y variados, Yolanda se refiere a dos muy curiosos. Por un lado recuerda “como mi madre hizo un día “aquaplano” detrás de la barca que, por aquél entonces llevaba un Hispano Suiza no marinizado” (…) “…un motor que había que echarle agua por encima para refrigerarlo”, apostilla jocosamente Bernardo. Otro recuerdo peculiar es cómo “fondeados en el azul turquesa de la cala Moltó, un amigo de la familia, “muy mayor ” desde mi persectiva de niña, me enseñó a hacer el muerto”. Cosas efectivamente de niñas, ¿verdad?
El Futuro
Tras un buen rato de recuerdos hablamos del futuro, del compromiso adquirido con el “rescate” de la “Barbiana” para la familia Llinás-Oliva en cala Ratjada, en el término municipal mallorquín de Cap de Pere. “Será siempre de uso privado pero no descartamos que podamos organizar algunos bautizos de mar dado que tiene una bañera espectacular ideal para estas cosas”. Y remata: “Desde luego salidas con los nietos vamos a hacer y Bernardo la aprovechará para su pesca y navegar a vela con ella”.
Bernardo añade además que “vamos a respetar su estado que es como el original…, ¡bueno no!, en el palo de mesana hemos obviado el violín que tenía, ya que creo que no es necesario. Probablemente nos planteemos poner también una sobrequilla de unos 250 kg ya que recuerdo que antes iba más lastrada, y ahora tiende a entrar algo de agua por las gateras al escorar”. Y es que Bernardo, lo que son las cosas, también tuvo la oportunidad de navegar a bordo de la “Barbiana” hace muchos, muchos años!
En panoramanautico.com nos satisface haber contribuido a este interesante reencuentro y, desde luego, estamos ansiosos por leer el artículo que la propia Yolanda tiene previsto publicar en la revista Skipper próximamente.
To be continued!
Ficha técnica Barbiana
Eslora: 7, 30 m
Manga: 2,40 m
Desplazamiento/arqueo: 3,74 Tn
Motorización actual: Nanni de 37 Hp
Velocidad máxima: 7 kn
Plano Vélico
Aparejada en Yawl (palo de mesana por delante del timón), Mayor, foque (en botalón restaurado como en origen. Con enrollador) y Messana eliminado violín original por innecesario. Trinqueta de garruchos sobre stay volante.
