Aunque a algunas marcas globales les pese, la verdad es que el mercado de los fuerabordas está en auge a escala planetaria. Especialmente en Estados Unidos y, de forma creciente en el Viejo Continente. Es un hecho que cada vez más embarcaciones de hasta portes considerables de 14 m de eslora, como es el caso de algunas semirrígidas, instalen fuerabordas.
Las motivaciones pueden ser variadas. Unos aducen que el mantenimiento es más sencillo por tanto, más económico. Otros enfatizan que el sistema de transmisión hace que las prestaciones sean muy elevadas y más deportivas y hay quien esgrime que la estética también cuenta y que cada vez guste más llevar instalaciones a partir de dos, tresm cuatro o de hasta cinco fuerabordas. Este periodista encuentra esta última propuesta como una obscenidad de nuestra sociedad actual respecto a la Tierra, pero lo cierto es que es una tendencia, hasta ahora sólo en gasolina, que compite claramente contra los motores intrabordas con transmisiones de eje, colas o pods en gasolina pero, sobretodo, en diésel.
Era cuestión de tiempo que “alguien” se animara a impulsar los fuerabordas diésel. De hecho ya hubo algún titubeo creemos recordar que por parte de Yanmar hará unos 20 años.
La madurez del mercado y el claro auge de los motores fueraborda cuyo último paso tecnológico ha sido la introducción de los 4T, ha propiciado la aceleración del proyecto de COX y el primer motor fueraborda de 300 hp en diésel. El CXO300!
La marca de origen británico Cox Powertrain, liderada por el ex CEO de Cosworth Tim Routsis, toda una referencia en el mundo de la automoción, ofrece un motor fueraborda concebido exclusivamente para su uso marino desarrollado por ingenieros de la Formula 1 y del automovilismo de alta gama, que ofrece las prestaciones de los motores fueraborda de gasolina con la economía y duración del diésel. El CXO300 ofrece 300 caballos con un peso de sólo 300 kg y, como hemos dicho, cumple con la regulación internacional sobre emisiones.
El proyecto está ya en la fase final del programa de desarrollo de 5 años y el lanzamiento del primer motor de esta marca va a cumplir con la normativa relativa a emisiones. Las intenciones apuntan que este nuevo actor dentro del mundo de los motores marinos va a introducirse preferentemente en el mundo de la náutica de lujo. De hecho dichos motores ya están operativos en el ejército británico, la primera institución pública que apoya decididamente en su desarrollo.
La británica Cox PowerTrain es una empresa ubicada en Sussex y desarrolla motores para la demanda militar británica ya que no está permitida la gasolina en los buques de guerra ni en sus ténders o neúmáticas de apoyo, lo cual es trasladable, por seguridad también, al mundo de los superyates, megayates y gigayates. Este hecho ha contribuido al rápido crecimiento de Cox Powertrain y a su plan de ofrecer fuerabordas con las mismas prestaciones que los fuerabordas de gasolina de 4T.
Además del respaldo del propio ejército británico, Cox Powertrain está nutrido de inversores privados de alto nivel entre ellos el propietario sueco de tetrapack. Las malas lenguas dicen que una marca cuya primera letra empieza por “uve” y últma acaba en “a”, ofertó un precio astronómico para su compra. ¡Not enough money, Sir!, fue la respuesta.