Con deportistas procedentes de todo el mundo, el BISC es, desde el año pasado, uno de los tres centros acreditados como centro de entrenamiento de vela por la World Sailing, también conocida como la Federación Internacional de Vela.
Este reconocimiento mundial ha sido otorgado gracias a sus completas instalaciones: una amplia zona de varada para las embarcaciones, vestuarios con todas las comodidades, una sala específica para secar y tender los neoprenos, gimnasio con máquinas de última generación específicamente diseñadas para entrenar movimientos que luego se harán en el mar, etc. Además, para los equipos extranjeros el BISC ofrece todas las facilidades de una residencia de alto rendimiento: hay 14 dormitorios con una capacidad total de 76 personas, salas polivalentes y un comedor que se adapta a los horarios y las necesidades nutritivas de cada deportista. Otro elemento destacable es que se trata de un edificio sostenible y completamente accesible para minusválidos.
Según Francesc Fayol, director del BISC, “somos un ‘hub’ internacional de la vela, un centro tecnológico a disposición de los regatistas que quieran venir a entrenar”. Como centro propio de la Federación Catalana de Vela, el BISC está exclusivamente dirigido a deportistas de élite. “Cualquier persona que esté aquí tiene que estar federada y, como consecuencia, pertenecer a un club. Por lo tanto, no queremos ser competencia de nadie, sino aportar un plus a los regatistas para que tengan más facilidades”, añade Fayol.
Cantera de grandes promesas de la vela
El BISC ha sido centro de formación de grandes regatistas nacionales. Entre los 14 deportistas que conformaron el equipo olímpico de Río hubo cinco catalanes. “Estamos muy orgullosos de nuestros deportistas ¡hay tantos que han conseguido llegar a lo más alto! En Cataluña hay una gran cultura de la vela”, explica el director del centro. “Ahora todos tienen en mente las siguientes grandes metas: las competiciones nacionales e internacionales de este año y, en 2020, los Juegos Olímpicos de Tokyo. Sin descuidar que en octubre de este año celebraremos aquí en el BISC el Campeonato Europeo de la clase Laser”, prosigue Fayol.
El BISC también es una zona de entrenamiento y residencia de los navegantes de la Base Mini Barcelona, un proyecto con sede operativa en Port Fòrum dedicado a la formación y preparación de deportistas que quieran participar en regatas oceánicas como la Mini Transat 2017, o que simplemente quieran perfeccionar sus habilidades en la clase Mini.
Port Fòrum
Port Fòrum se encuentra a tan sólo 15 minutos del centro de la ciudad de Barcelona, en el inicio de la Avenida Diagonal y en la confluencia con Sant Adrià de Besòs. Tiene una capacidad de 486 embarcaciones distribuidas en tres zonas diferenciadas: la dársena interior con 210 amarres de 10 a 25 metros de eslora; la dársena exterior, con 31 amarres para grandes esloras hasta 80 metros; y, por último, la Marina Seca, la más grande de Cataluña, con capacidad para 245 embarcaciones a motor de hasta 10 metros.
En el ámbito de tierra Port Fòrum cuenta con varios restaurantes, empresas de alquiler de embarcaciones y un centro Decathlon. En mayo de 2017 se inauguró el Café del Mar más grande del mundo, y durante el verano también lo hará Game Point Center, el mayor Escape Room de Europa. Una actividad comercial y empresarial que convive con el apoyo a la actividad deportiva y a los jóvenes emprendedores: Port Fòrum alberga y patrocina la Base Mini Barcelona, cuya finalidad es la de facilitar las condiciones necesarias para la formación y experimentación de regatistas oceánicos para que puedan competir en regatas de altura en solitario o a dos, principalmente la Mini Transat; y el Pop.Up Inspire, un evento mensual, celebrado el segundo fin de semana de cada mes, donde convergen jóvenes diseñadores, artistas noveles, foodtrucks, etc. para presentar sus creaciones al público asistente.
Asimismo, Port Fòrum también es la base náutica oficial del BrainXperience, un proyecto solidario creado por el deportista Joaquín Inglada en el año 2015 quien, tras sufrir un grave accidente que le dejó diferentes secuelas y, a través de sus retos deportivos, pretende recaudar fondos para las entidades que realizan destacadas acciones de ayuda humanitaria a favor de las personas más desfavorecidas o con dificultades. Este verano, y por primera vez en la historia de la motonáutica, Joaquín dará la vuelta a la península ibérica en moto de agua, una travesía extrema de más de 2.000 millas.