Producido en Korean Wing Ship Technology Corp, el primer superyate “volador” del mundo lleva cinco años de desarrollo en Corea y actualmente está en la fase final del proyecto. El prototipo cuenta con la colaboración de DSME (Daewoo Shipbuilding & Marine Engineering Co Ltd) con la participación del gobierno coreano y las instituciones de capital de riesgo.
Este peculiar yate utiliza el concepto Wing in Ground Effect (WIG) un sistema que le permite navegar por encima de la superficie del agua en un colchón de aire dinámico creado por la elevación aerodinámica. En este caso, el ala rígida del Wingship va a ras de suelo, entre 2 y 5m de la superficie, y utiliza sustancialmente menos energía que los hidroaviones, helicópteros o aerodeslizadores. Esto le permite navegar de forma estable sin que le afecten las turbulencias o la acción del oleaje.
Con una envergadura de 29 metros y un peso de 18 toneladas, el Wingship puede transportar hasta 50 pasajeros en el modo de ferry rápido a una velocidad de crucero de 180 kilometros por hora, mucho más rápido que un ferry convencional.
Según Kang Byung Jae, director del proyecto: “Aunque el principal mercado para estas embarcaciones es el transporte rápido de pasajeros, estamos diseñando las variaciones de la nave dirigidas al transporte rápido de VIPs y como un superyate “volador” con acomodación a bordo para ser utilizado tanto bajo vuelo como cuando está amarrado”.
Esta versión alto standing del Wingship podría ser muy válido para las zonas tropicales o islas remotas, como Indonesia, Filipinas y las Islas Maldivas por su capacidad para cubrir largas distancias de forma muy rápida.
El Wingship utiliza tecnología con licencia de uno de los pioneros de WIG craft, el profesor Hanno Fischer de Alemania, y está siendo desarrollado y fabricado bajo la aprobación de las normas Lloyd’s Register.