En los últimos diez años, el sector de la náutica de recreo en España ha evolucionado hacia la profesionalización, en este sentido, se han constituido diferentes asociaciones profesionales que representan y defienden los intereses de la industria y de las empresas que la conforman.
La Asociación Nacional de Empresas Náuticas, ANEN, patronal del sector, integra el 90% de la industria y de las empresas del sector náutico (astilleros, asociaciones náuticas autonómicas, importadores de embarcaciones, motores, electrónica y electricidad, accesorios, servicios, escuelas náuticas, instalaciones náutico-deportivas, náuticas, prensa sectorial, salones náuticos, empresas de charter, aseguradoras, etc.). Por su parte, la Asociación Española de Grandes Yates, AEGY, representa a los principales astilleros, chárter, brokerage, mantenimiento y reparación, seguros, electrónica, puertos y marinas, que dan servicio a los grandes yates que operan en España. Ambas asociaciones han llegado a un acuerdo para reivindicar el papel de la náutica como sector económico y fortalecer la representatividad del sector náutico ante la Administración y las instituciones.
Actualmente la náutica es un sector reconocido como tal en la normativa jurídica que regula su actividad, como es la Ley de Navegación Marítima, (en nuestra sección de Legislación Náutica encontrarás varios artículos sobre esta Ley) publicada en septiembre de 2014. Hasta entonces, estaba sometida a la regulación de la Marina Mercante, y una embarcación de recreo (hasta 24 metros de eslora) y un buque de recreo (más de 24 metros de eslora) se consideraba jurídicamente igual que un buque mercante.
En este período se han conseguido importantes avances que, en el ámbito legislativo, permiten a la náutica española competir en los mercados internacionales en condiciones notablemente mejores que diez años atrás.
Pero hay un ámbito en el que la náutica tiene todavía mucho que trabajar para alcanzar un estatus de igualdad con nuestros países vecinos más próximos, Francia, Italia, Inglaterra, Holanda… Se trata de la fiscalidad que colapsa el desarrollo de este sector con un sistema impositivo que no existe en ningún país del mundo.
En España, la compra tanto de una embarcación como de un buque de recreo, de más de 8 metros de eslora para uso particular, se graba con un 12% de impuesto de matriculación (IEDMT- Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte-), además del 21% de IVA.
En ningún otro país del mundo existe impuesto de matriculación y, sin ir más lejos, en Italia y Francia el IVA aplicado a la compra de una embarcación se graba con un 20% y un 19,6% respectivamente, frente al 33% de España (IVA + IEDMT).
La náutica de recreo, sector tractor de la economía
Se considera náutica de recreo toda la actividad económica que se desarrolla en torno a las embarcaciones de hasta 24 metros de eslora.
Bien es cierto que la náutica dista mucho de los grandes sectores económicos que sustentan la economía nacional en cuanto a generación de riqueza. Sin embargo, el efecto multiplicador de la náutica está calculado y se cifra en un 3,61 sobre la producción efectiva nacional, un 5,27 sobre el Valor Añadido Bruto y un 6,71 sobre el empleo.
Es en este efecto tractor de la economía, y especialmente del turismo, donde reside el potencial de la náutica, cuya producción efectiva (4.763 millones) alcanza los 17.192 millones €, sumando efecto directo + efecto inducido.
Asimismo, los 1.079 millones € de valor añadido bruto que la náutica aporta a la economía nacional, ascienden a 5.690 millones €, sumando efecto directo + efecto inducido.
En el apartado de empleo, la náutica de recreo genera 16.000 puestos de trabajo directos, que sumando los que genera en otros sectores en los que indirectamente interviene, ascienden a 107.434.
Los grandes yates en España generan un gasto medio anual de 857.216.577 €
El sector de grandes yates incluye toda la actividad económica que se desarrolla en torno a las embarcaciones de más de 24 metros de eslora.
Con una cifra de generación de empleo directo de 5.682 puestos de trabajo directos, y un gasto medio al año de 857.216.577 €, España por sus condiciones climatológicas, calidad y dotación de sus infraestructuras para este tipo de barcos (puertos, amarres, empresas de reparación y mantenimiento…), podría atraer al 15% (105 barcos de más de 24 metros de eslora) de los grandes yates que navegan por el Mediterráneo.
Pero la realidad es otra: por el Mediterráneo navegan el 70% (767) de los barcos de gran eslora del mundo, sólo el 1% (11) son de bandera española.
El gasto medio anual por embarcación oscila entre los 890.000 € (embarcaciones de entre 24 y 30 metros) y 4.000.000 € (embarcaciones de más de 60 metros de eslora).
La hoja de ruta del acuerdo entre ANEN y AEGY
El acuerdo suscrito entre las dos asociaciones responde a un doble objetivo: sumar esfuerzos para defender los intereses del sector náutico español, en todos los foros e instituciones afines nacionales e internacionales, y conseguir de la Administración española los apoyos necesarios para impulsar su desarrollo económico.
Para ello, ambas asociaciones trabajarán para alcanzar la aplicación de las siguientes mejoras en sector náutico:
- Armonización de la legislación del sector náutico con la de nuestros países vecinos más próximos (Francia, Italia, Malta) para competir en igualdad de condiciones.
- Desarrollo de una Campaña de popularización/sociabilización de la náutica española.
- Mejorar la formación en el sector náutico con la creación de cursos de grado medio y superior de Formación Profesional (mantenimiento, reparación y construcción de embarcaciones de recreo).
- Impulsar el emprendimiento del sector náutico, incorporando nuevos talentos y nuevos proyectos empresariales.